CAPÍTULO 25

2K 99 2
                                    

Todos los invitados ya habían llegado, la ceremonia daría inicio, Emma entrará acompañada de su mamá, el papá de Emma falleció cuando ella era muy niña y desde ahí ha estado sola con Margaret, el plan inicial era que entrara con mi papá, pero debido a su accidente aun no está en condiciones de salir de casa, él se quedó en casa con Mateo, quien regresó a pasar unos días con la familia, yo entraría con mi mamá, hubiera entrado con Mateo, pero tampoco fue posible.

***

Mi mejor amiga se había casado, aún no lo podía creer, todo había salido maravilloso, no pude evitar llorar al verla. Ahora todos disfrutábamos de la fiesta, desde mi sitio, aquí sentada, podía visualizar como casi todos los invitados se movían al ritmo de la música disfrutando del momento, Emma se veía tan hermosa, me daba mucha felicidad.

Todo el día había pasado demasiado ocupada con los preparativos de la boda y arreglándonos para el momento, a penas ahora podía sentarme a procesar todo lo ocurrido la noche anterior, me sentía avergonzaba por una vez más haber sido rescatada por Dylan en situaciones de ebriedad, a parte no debí haberle dicho todas esas cosas, al menos no de esa manera ni en ese estado, ahora trabajo en su empresa y debía mantener un trato profesional, nada más que eso, me había esforzado en que así sea y ahora yo misma había fallado a esa norma.

-Ahí estás. -La voz de Nicholas me sacó de mis pensamientos. - ¿Cómo te encuentras?

-Hola, ahora mejor... -Dije un poco avergonzada.

- ¿Lo dices por el pequeño Show de anoche? -Dijo con diversión.

-Ni me lo recuerdes, lamento haberte hecho pasar por ese momento, puedo prometerte que no suelo ser así. -En serio me sentía avergonzada.

-Disculpas aceptadas. -Me respondió con un toque de humor. -Espero que no te haya molestado que Dylan sea quien las lleve. -Eso lo último lo dijo con lo que parecía preocupación.

-Descuida, después de hacer el ridículo nada pudo ser peor. -Dije con un poco de humor.

-Que quede claro que lo dijiste tú y no yo... -Bromeó.

-¡Hey! No lo dije en serio. -Le seguí el juego, nos reímos un poco.

-Bueno, voy con Abigail, seguro ya debe estar buscándome, te veo al rato Lía, cuídate.

Las bodas pueden ser tan lindas como nostálgicas, resulta que si no tienes a tu amor correspondido pueden causarte algo de tristeza, al menos así me hacían sentir, cuando conocí a Dylan y empezamos a salir me sentía segura de él, llegué a creer que algún día tendríamos nuestro "felices para siempre" sé que puede llegar a sonar muy fantasioso, pero con el sentía que había encontrado el amor, sin embargo, la realidad me hizo despertar de esa fantasía.

Me propuse disfrutar más de este hermoso momento, estaba bailando al compás de la canción junto con un primo de Emma el cual conocía de ya tiempo y quien me caía muy bien.

-Me duelen un poco los pies, me iré a sentar un rato. -Le hice saber, el asintió mientras se quedaba bailando en la pista muy divertido.

En serio necesitaba tomar asiento, mis pies me lo estaban exigiendo.

-Hola Lía. -Levanto la mirada y me encuentro con Tom.

-Tom, hola, que gusto volver a verte. -Lo saludé con entusiasmo, en realidad si me daba mucho gusto volver a verlo.

-Lo mismo digo. -Dijo mientras se acomodaba en una silla a mi lado. - ¿Cómo has estado?

-Bien, ya sabes, el trabajo y esas cosas...

-Me enteré que ahora trabajas para Henderson Enterprises. -Y ahí estaba, yo intentando no recordarlo y el universo se empeña en hacerlo.

AMELIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora