Capítulo 3

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"Es una noticia emocionante para el mundo, dos sangres reales han formalizado su compromiso el día de ayer. El apuesto príncipe Kim sí que lo tenía escondido, pues se ha comprometido oficialmente con el menor de la dinastía Jeon, a quien casi nunca se le vió en público. Esperamos que pronto nos presenten el fruto de la unión de las dos casas más importantes del continente Asiático..."

Jungkook observó horrorizado el reportaje e inmediatamente ordenó que apagaran la televisión.

Se cruzó de brazos con evidente molestia y gran desacuerdo "Tonterías" dijo enojado y se levantó del sillón "Pura basura" escupió las indecorosas palabras mientras se abría paso fuera del salón.

Su asistente e instructor asignado en casa de los Kim le observó molesto
"Su alteza, no es digno de un omega real expresarse de esa manera, el protocolo menciona que..." aquel hombre soso recitó aquellas palabras que el menor comenzaba a odiar.

Jungkook rodó los ojos y cruzó la puerta más enojado aún "El protocolo esto, el protocolo aquello ¡Estoy harto de ese maldito protocolo!" Su asistente se sobresaltó mientras el omega salía a pasos agigantados de aquel salón.

"Maldito, maldito Kim Taehyung" gruñó con desespero, como si el aludido pidieran escuchar sus reclamos. "Me quitas mi vida y me haces venir a esta prisión solo por una estupidez, no lo soporto ni un minuto más" los guardias de los pasillos escuchaban las quejas salir de sus labios; pero solo se limitaban a inclinarse en señal de respeto y sumisión.

Aquel pequeño príncipe no se percataba de un molesto Taehyung escuchándolo conforme su voz se acercaba más a su estudio, así que salió  a encarar a aquel pequeño fastidioso.

"¿Alguna otra inconformidad, príncipe Jeon?" Preguntó el castaño con una sonrisa burlona desde el umbral de la puerta.

Jungkook le observó sobresaltado. No pasando por alto, claro, aquel traje color marrón que se ajustaba correctamente a su varonil complexión.

"Yo... solo estaba, umm" Jungkook titubeó repentinamente tímido ante la mirada acusatoria del mayor "No es lo que usted cree, yo solo estaba..." trató de justificarse en vano, pues no encontró palabras creíbles para decir.

El príncipe Kim levantó su mano derecha en señal de silencio para que dejara de hablar. Jungkook entendió lo que solicitaba y cesó de parlotear ante la indicación del alfa.

"Olvídalo, no quiero escuchar tus excusas baratas" resopló y Jungkook se avergonzó un poco "Ven a mi estudio, necesito consultarte algo" le ordenó.

El pelinegro por un momento se sintió importante en aquel palacio, como para que el príncipe heredero le solicitara su presencia, pero tan pronto como se emocionó también se decepcionó.

El más alto le invitó a que tomara asiento en la pequeña sala dentro del estudio donde muchos papeles se encontraban desordenados sobre su escritorio.

"Estamos a días de la boda" informó y Jungkook suspiró con pesadumbre a lo que Taehyung se acomodó un tanto molesto en su asiento "No, no me hagas esos berrinches a mí. Pon un poco de seriedad, no se trata de una boda cualquiera, es la boda del siglo por ser el príncipe heredero." Sentenció con voz firme y el pelinegro tal vez debería quedarse callado, pero joder, por algo era un Jeon.

Llevó ambas manos hasta posarlas en el escritorio con una mirada retadora. "Sabe, príncipe, ya estoy enfadado de que todo gire a su alrededor y desde que llegué a esta maldita casa no he recibido ninguna otra palabra que no esté relacionado con los términos "príncipe heredero" y no creo poder soportar escucharlos una vez más" finalmente dijo aquello que llevaba días molestándolo.

Un esposo para el príncipeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora