Capítulo 37

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Sentados frente a frente, sobrellevando la situación como alguien finalmente maduro, que demostraba su crecimiento al afrontar aquella piedra en su zapato, para evitar más problemas y con toda la intención de ser breve y conciso, se encontraba ahí. 

Mas ahora que recibió la mirada contraria sintió algo de pena.

No podía dejar de culparse a sí mismo por haber arrastrado los problemas hasta ese punto, no solo había lastimado a Jungkook, sino que su terquedad también había traído una dependencia enfermiza a la omega.

Porque después de su casamiento él pudo jurar que la desconoció por completo; la pasada joven centrada en su mayor sueño había desaparecido y ahora solo quedaba una mujer empecinada con su persona.

Y lo que era aún peor es que él mismo se había perdido en el camino, sin saber cómo escapar de toda aquella maraña de problemas hasta ese momento. Confrontando a la mujer en un restaurante vacío, a excepción del personal.

"¿De qué querías hablarme, Taehyung?" Cuestionó dudosa, aunque para ser sinceros ya tenía algunas sospechas sobre el motivo.

Porque no era nada estúpida, claro que no, desde hacía meses era consciente de la distancia e indiferencia que había puesto el alfa entre ambos y no dudaba en que ahora sus sentimientos hacia ella eran completamente nulos.

Sin embargo, eso no significaba que ella dejaría ir con facilidad al hombre que ella quería. Por supuesto que no lo haría.

Sin saber que ese amor que alguna vez le tuvo ahora solo era una loca y enfermiza obsesión. Ella misma estaba cavando su propia tumba o perdición sin saberlo y, aunque lo supiera, poco le habría importado.

El sentimiento de querer ganar lo que algún día le perteneció se apoderaba de su persona día a día, conforme el paso del tiempo más se convencía de lo mucho que detestaba a Jeon Jungkook por robarle su preciado tesoro.

Sin embargo, todos aquellos sentimientos y pensamientos eran totalmente desconocidos para el alfa frente a ella que tan solo soltó lo que tanto había ensayado en su memoria.

"Primero deseo disculparme contigo, sé que en el pasado te prometí muchas cosas que ahora me son imposibles cumplir" comenzó diciendo el príncipe con el rostro tranquilo a pesar de su nerviosismo creciendo en su interior.

Inmediatamente se hizo presente la mirada rota de la omega que le hizo sentirse un tanto apenado. "No es imposible si seguimos intentándolo, Taehyung" insistió la chica algo asustada por lo que escuchaba.

Sabía que nunca, en ningún lugar, encontraría a alguien que le llenara como el alfa lo hacía. Y si podía continuar aferrándose a algo incierto lo haría, aunque así lastimara a otros, al hombre y a ella misma.

El aludido tan solo negó con la cabeza sin parecer molesto, tan solo nostálgico. "Me es imposible cumplir con esas promesas no solo porque no pueda, sino porque ahora tampoco quiero hacerlo" explicó finalmente.

La otra no pudo evitar que una lágrima se escapara de sus cuencas. Porque ahí estaba el hombre que ella quería diciéndole que todas aquellas promesas que alguna vez le hizo ya no se las podía sostener y no precisamente por estar casado ante la ley, sino porque ya no quería, en su corazón ese deseo había desaparecido del alfa.

Agachó un poco la vista para controlar su voz antes de hablar." ¿Ya no me amas?" Cuestionó.

Taehyung le miró por unos segundos a los ojos apenado por la situación; pero negó con la cabeza en señal de negación a la pregunta. "Yo... nunca te he amado" confesó finalmente para ella y para sí mismo.

Han Hyori tan solo rio en medio de sus amargas y calientes lágrimas que se deslizaban desde sus ojos hasta sus mejillas. "No puedes decirme que te haz enamorado de él" musitó algo ida.

Un esposo para el príncipeWhere stories live. Discover now