Prison lovers

Capitulo 6

No paso mucho tiempo antes que fuera zarandeado con fuerza, despertando de su dulce sueño, las frazadas que le cubrían hasta el pecho, resbalaron a su cintura, con brusquedad. Louis abrió los ojos, perturbado, y observó un montón de ropa volando hacia su rostro. 

―Cámbiate y lárgate ―Recargado contra la pared, sin camisa y con el pantalón a medio abotonar, se fumaba un cigarrillo.

Los ojos de Louis salieron de órbita y un dolor colosal atravesó su frágil corazón. Se vio desnudo, apenas cubierto por sábanas, con su ropa regada en la cama, su piel aclamando por el contacto del moreno y la esencia de él, mezclada con sangre, esparcida en sus entrañas y piernas. Realmente había pasado, realmente se había entregado a él, momentos atrás, cuando apenas despertó pensó que se trataba de un sueño, pero gracias a las palabras de Zayn se percató que no lo era, porque sabía que si hubiese sido en sus sueños, el moreno le habría recibido con un beso, una simple caricia o hasta una mirada furtiva. Aun así, era duro, no había necesidad de humillación. Quería llorar hasta que sus ojos se secaran, ¡se sentía como basura! 

De cierta forma, sabía que algo como eso ocurriría, sin embargo, quiso mantener la esperanza, pero al parecer, sólo alargó su tormento. 

― ¡Ya despierta!... Levanta ese hermoso culito que estás en mi cama y quiero dormir ―Gritó socarronamente y a Louis hasta le pareció notar hastío en su voz. Las ganas de llorar se incrementaron, pero quería ser fuerte, no iba a otorgarle el gusto de verlo chillando. Lo soportaría hasta su celda, donde podría verter su dolor.

Se incorporó y un fuerte dolor le atacó desde el esfinter y recorrió la columna vertebral, se masajeó la espalda baja, respirando entrecortadamente. Zayn lo notó e irrumpió con burla:

―No te preocupes, muchos han estado justamente donde ahora estás, inclusive algunos con los mismas síntomas aunque no con tan buena suerte, ¡siempre se quejan! Hasta que le agarran el gustito y después están tan usados que nadie se los quiere tirar ―Entre el dolor y la tristeza también se acumuló la rabia, Louis cerró los puños y levantó la mirada desafiante.

― ¡Eres un idiota! Utilizas a las personas como meros objetos y después de que te sirves de ellos, los botas... eres, eres... ―Zayn se adelantó un par de pasos, le tapó la boca y le arrojó de vuelta a la cama con rudeza.

―La última persona que me insultó está seis metros bajo tierra, escoge mejor tus palabras, Louis... ―Y se sintió tan débil cuando le escuchó pronunciar su nombre, fue en ese preciso instante cuando supo que no importara que le tuviera bajo su cuerpo amenazándole, o que inclusive, le lastimara como lo estaba haciendo, él ya le había entregado su corazón y no había marcha atrás, por primera vez en su corta vida, se había enamorado.

Apenas se percató que la mano libre de Zayn se había introducido bajo las sábanas que le cubrían, la sintió acariciando su pierna, subiendo lentamente y Louis se halló disfrutando del roce.

―Aunque para ti, tendría otro tipo de castigo ―Susurró peligrosamente, Louis cerró los ojos derrotado y comenzó a derramar lágrimas silenciosas. 

―Déjame... ¿Acaso no me estabas echando?... Ya, ya tomaste lo que querías ¿no era eso lo único que te importaba? ―Las lágrimas fluían libremente por su rostro, Zayn le miró fijamente y sonrió cínico.

― ¿Tomar? ¿Qué tomé? ¿Te refieres a que te la metí? ―Louis dejó de forcejear y sintió un vacío en el estómago ―Bueno, no escuché que te quejaras, ¿o es que no recuerdas cuando tú mismo me pediste que te co...? 

― ¡Cállate! ―Interrumpió sonrojado, respirando agitado a causa de la vergüenza e indignación. ― ¿Cómo...cómo puedes tener tan poco tacto? ―Se quejó limpiándose la sustancia salina del rostro, el mayor resopló ablandando sus facciones, sorprendiendo a Louis, y justo cuando pensó que tal vez se disculparía, sus palabras volvieron a desilusionarlo.