★彡[ʀᴀᴘᴜɴᴢᴇʟ/ ᴋʏᴏʏᴀ ᴏᴏᴛᴏʀɪ ᴏᴜʀᴀɴ ʜᴏꜱᴛ ᴄʟᴜʙ *ᴇꜱᴘᴀÑᴏʟ*]彡★

𝒞𝒽𝒶𝓅𝓉𝑒𝓇 𝟣𝟦: 𝐿𝑒𝓉'𝓈 𝑔𝑜 𝒮𝒽𝑜𝓅𝓅𝒾𝓃𝑔!

-¡Guau! -Sosteniendo sus manos en su pecho, los ojos de Miki brillaron mientras miraba alrededor del gran centro comercial. Tantos artículos de producción en masa reunidos en un lugar llamado los grandes almacenes. Fue un honor para ella ser invitada por Haruhi a pasar el rato, mucho menos a uno de estos eventos sagrados conocidos como el 'Especial de la Ciudad Natal'.

-Miki-senpai... -Haruhi soltó una gota de sudor, mirando mientras saltaba entre los vendedores y observaba los artículos de cerca, tratándolos como si fueran tesoros en un museo. -Has estado diciendo eso durante la última hora.

-Lo siento, lo siento, Haruhi. -Rascándose la nuca, Miki se rió entre dientes. -¡Estoy muy emocionada! Es mi primera vez en un lugar como este.

Dejando escapar un suspiro irónico, Haruhi se enderezó.

-Bueno, es casi la hora del almuerzo. ¿Deberíamos empezar a subir las escaleras?

-¿Eh? ¿Qué tienen aquí? -Miki se inclinó hacia adelante, un poco demasiado cerca para el gusto de Haruhi. -¿Atún de lujo? ¿Cocina francesa? ¿Qué tipo de cosas comen los plebeyos en lugares como este? -Pasando su brazo por el de Haruhi, Miki se lanzó enérgicamente hacia adelante, arrastrando a la pobre Haruhi. -¡Sea lo que sea, vamos! -Ella vitoreó.

-¡Wah! ¡Miki-senpai, por favor no me jales así! -Con una expresión entrañable, Haruhi protestó.

Mientras las dos chicas caminaban alrededor de la esquina del quinto piso con los brazos entrelazados, se detuvieron en seco y vieron una figura familiar. Aunque se veía mucho más rudo y extremadamente agotado, definitivamente era él, luciendo más como un cachorro perdido que el chico prestigioso que todos sabían que era.

-¿Kyoya-kun? -Miki gritó, parpadeando. Lo primero que quería hacer era acariciarle el pelo de la cama que sobresalía como un pulgar dolorido, pero -hay un momento y un lugar para todo. -como dice Kyoya. Su mente luego vagó al lugar donde él le dio un casto beso en la mejilla durante el festival de verano. Parpadeó, sintiendo que su corazón se saltaba un latido mientras tragaba con fuerza para calmarlo. Ella no sabía lo que significaba. Y eso la molestó.

-Realmente es él. -Haruhi lo miró también, sus palabras sacaron a Miki de su línea de pensamiento. -¿Qué estás haciendo aquí?

Hubo un momento de silencio mientras Kyoya miraba a las dos chicas pensativamente. Apoyando una mano en su barbilla, preguntó.

-¿Cuánto tienen ustedes dos?

-¿Eh?

Al final resultó que, Tamaki probablemente encontró el volante que Haruhi le dio a Miki que estaba en su escritorio y decidió emprender su propia aventura. Especialmente después de que Miki le disparara en el corazón diciendo que tenía 'planes para ese día'.

Este día.

Así que el pobre Kyoya fue arrastrado a los grandes almacenes todo el camino en Izumi, Osaka sin su teléfono celular, dinero y con el estómago vacío.

-Kyoya-senpai. -comenzó Haruhi un poco a regañadientes mientras los tres hacían fila en una tienda de comida rápida. -¿Estás seguro de que estás de acuerdo con comer aquí? Hay un restaurante en el piso de arriba. -Señaló, moviendo las cejas.

Mirando el menú, Kyoya respondió con indiferencia.

-No tienes tanto contigo, así que tenemos pocas opciones. Además. -miró a Miki que estaba frente a ellos, subiendo y bajando desde la planta de su pie con entusiasmo. -No creo que le gustaría ir a un restaurante, no después de ver este lugar. -Él entrecerró los ojos oscuros. -Oh, y asegúrate de obtener el recibo. Voy a hacer que Tamaki te pague diez veces más tarde.