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Con los días contados, hubo una horrible noticia: Umbridge se había visto declarada como suma inquisidora.
Una completa basura, según Regulus.
Siempre estaba detrás de Olivia y de él, intentando separarlos. Además de que eso es algo que no debe ser visto en un colegio, ¡solo se toman de las manos!
No estaban haciendo nada malo.
Por las noches intentaban descubrir los escritos en griego antiguo, ganándose noches sin dormir y grandes ojeras.
Pero también había otros problemas: Dolores iba detrás de Harry y Olivia. ¡Había herido a la pobre Hedwig! Y siempre estaba detrás de la pareja, era realmente insoportable.
Gracias a Dobby, el elfo libre, habían encontrado el lugar perfecto para poder practicar sin que nadie se entere. Especialmente la sapo rosa.
La sala de menesteres se había convertido en un refugio para los alumnos, y estaban preparados para aprender.
El lugar se ambientaba a lo que necesitara esa persona, y era un lugar perfecto para practicar. Y tenía unos buenos libros que eran del interés de Olivia Lupin.
Hubo un golpe suave en la puerta. Harry giró la cabeza. Ginny, Neville, Lavender, Parvati y Dean habían llegado.
— Wow—dijo Dean, mirando fijamente alrededor, impresionado—. ¿Qué es este lugar?
Harry empezó a explicar, pero antes que hubiera terminado más personas habían llegado y tenía que comenzar de nuevo. Para cuando las ocho en punto llegaron, cada cojín estaba ocupado.
Harry se desplazó hacia la puerta y dio vuelta a la llave que sobresalía de la cerradura; está hizo un satisfactorio clic y todos se quedaron callados, mirándolo.
Hermione marcó cuidadosamente su página de "Maleficios para los Hechizados" y apartó el libro...
Mientras que Regulus se apoyó en una pared cercana, cediéndole el cojín en el piso a su novia. Blaise se colocó a un lado de él, con algunas miradas que ignoró.
No todos sabían que ambos slytherin, especialmente Zabini, estarían ahí. Aunque no preguntarían, temían despertar calvos al día siguiente.
Hacer que algunos despierten calvos al día siguiente, era la pasión de Regulus Pólux Black.
— Bien— comenzó Harry, ligeramente nervioso—. Éste es el lugar que hemos encontrado para las sesiones de práctica, y ustedes lo... lo han encontrado aceptable.
