¿Realidad? (Libro 2)

Cap 21

Kenner Ruiz.

El que me ascendieran de mi puesto solo me mantenía más ocupado, por un lado, eso me beneficiaba mi actitud con Geraldine aún me hacía sentir algo culpable, no quería enamorarme perdidamente, pero alejarme así nada más tampoco era lo correcto entonces decidí ir a su departamento estaba preparado para recibir cualquier respuesta.

Éramos tan cercanos que no fue necesario que yo tocara la puerta, ya que yo tenía una copia que ella me había entregado y yo le había dado una copia del mío. Esperaba sorprenderla con un pastel de frutos rojos que le encantaba, sin embargo, él sorprendió fui yo y no saben lo imbécil que me sentí.

Unos gemidos provenientes de su habitación llamaron mi atención, creí que podía ser una aventura de una noche... o algo parecido eso no quitaba que fuera doloroso, pero al menos no era tan terrible como lo que vi.

La espalda de un chico fue lo primero que note como la embestía una y otra vez, el sonido se podía oír en todo el departamento, aún tenía esperanzas esto no significaba nada.

Podría contra esto y de alguna forma sentía que había sido mi culpa, pero cuando la escuche decir su nombre en medio de un gemido... entendí que el único que no tenía nada porque quedarse era yo.

Decidí macharme.

Joyce era el dueño de su mente... cuerpo y alma, en ese instante ni siquiera pensé por qué y como estaba libre, solo sabia que mi corazón pesaba. Que el nudo en mi pecho me molestaba y que solamente quería olvidarla.

...

Narra Geraldine Curie.
Me obligó a despertar, tenía la leve sensación de que al abrir los ojos todo lo que vería sería una cama vacía o que todo habría sido un sueño y de algún modo eso me aterraba.

Así que finalmente después de tomarme unos minutos decidí abrir los ojos, la cama no estaba vacía... Joyce estaba profundamente dormido y sus brazos rodeaban mi cintura.

Sentí una especie de alivio y temor, una parte me odio por no poder ser fuerte frente a él, por no poder fingir que no lo necesitaba, por no poder superarlo y por otra parte me alegraba estar junto a él, porque quería creer que nuestros días podrían ser así siempre, olvidar los errores, los miedos,las mentiras... para ser solo nosotros, sin embargo, la vida real es muy distinta.

—¿Desde cuándo despiertas tan temprano?—inquiere con voz somnolienta y yo doy un pequeño brinco al sorprenderme.

—Tengo una nueva rutina, Joyce—sonreí leve y lo miro a los ojos.

—Auch, ¿y salir conmigo esta tarde arruinaría sus planes señorita Geraldine?

—Lamentablemente sí—sonrió y hago una pequeña mueca, opacar el momento pero debía saber que ocurría ahora—Joyce... lo que ha pasado

—Lo sé,sé que dirás que posiblemente fue un error—acaricia mi mejilla y eso me hace sentir un montón de mariposas en el estómago—que quieres saber demasiadas cosas, y te las diré si aceptas salir conmigo.

Sonríe levemente y deja un beso en mi mejilla—por ahora podemos olvidarnos de todo solo un segundo —susurra cerca de mi oído y eso me hace contener la respiración unos instantes, su voz adormilada suena tan sexy que termino asintiendo.