¿Habéis pensado lo que pasaría Marinette siendo la nueva guardiana? ¿Seguirá enamorada de Adrien?
Marinette ya no es la misma. Ha tenido que alejarse de sus amigos, sus padres están preocupados por ella e incluso están intentando averiguar lo que l...
Adrien, Alya, Juleka, Alix y Mylène están en un círculo alrededor del nido de las crías, pensando en cómo podrían ellos amaestrarlas. No hacen más que quedarse quietas e intentar moverse alrededor del nido. Piensan que esto es descabellado y que no podrían salir de la selva nunca más.
Por otro lado, siguen pensando en la teoría de Lady Lion hace un minuto. ¿Y si realmente entre las chicas hubiese alguna superheroína que Ladybug escogió para que le ayudara con un villano? No era tan descabellado después de todo, ¿no? Ladybug ha sido Marinette después de todo este tiempo y ¿por qué Marinette no habría escogido a alguien que conoce lo suficiente para confiarle un prodigio?
-Umm... ¿con que superheroínas, eh? -pregunta Adrien, alzando una ceja como lo hacía Chat Noir muchas veces.
-¿Eh? No sé de lo que estás hablando... -dice Mylène, asustada.
-Bueno, no creo que sea tan peligroso saber las identidades después de saber que mi padre había sido Lepidóptero y ShadowMoth...
-Pero aún falta saber la de Mayura... -añade Juleka casi murmurando.
-¡Ajá! Sabía que alguna de vosotras sería una superheroína -le corta Adrien a Juleka de golpe.
Las demás chicas miran a Juleka, asombradas.
-E-Está mintiendo, chicas...
-No lo creo. Sabías perfectamente que no podías revelar tu identidad a nadie por Mayura, palabras que una superheroína diría a cualquiera como lo ha hecho Ladybug durante muuucho tiempo -añade Adrien, sonriendo- pero no te preocupes, Juleka, era de esperar que tú llegases a tener un prodigio. Tienes un gran corazón.
Juleka hace una mueca de duda mientras se sienta, rodeando las rodillas con los brazos.
-Cr-Creo que no deberíamos estar hablando sobre esto. Deberíamos intentar... amaestrar a las crías.
Alix es la que guarda más silencio. Se queda pensando mientras que escucha cada palabra que añaden sus compañeros. Intenta pensar en alguna solución a ambas dudas que tienen en este momento.
-Juleka, ¿cómo hiciste para acariciar a la mariposa azul? -le pregunta la de pelo fucsia a su amiga.
-No sé... Me gustó la mariposa, me acerqué y como era muy hermosa... simplemente quise acariciarla y lo hice. Supongo que... si no lo hubiese hecho, me habría arrepentido porque era muy suave...
Alix sonríe y cruza los brazos.
-Creo que ese es el truco. Tenemos que mostrar nuestro lado... bueno, ya sabéis, valiente, y demostrar al animal quién manda.
-Bueeeno... no sé yo -duda Mylène, asustada-. Yo sería incapaz de amaestrar a un león o a un murciélago, así que, mejor yo...
-¡No, tú también, Mylène! -le obliga Alix.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
