Capítulo XVI: Julerose

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-¡Al fin un enchufe para que carge mi móvil! -exclama Adrien, corriendo a él para cargar su móvil.

-Qué desesperado estás. Parece como si no hubieses podido sacarte más fotos para subirlos a Instagram -comenta Alix, vacilona.

-Muy graciosa, Alix, y para tu información he estado 2 días sin poder utilizar mi móvil, así que no ha sido tan horrible...

Adrien se queda recordando cómo hace 2 días por la mañana se desesperó al ver que su móvil se había quedado sin batería.

-Como digas...

Todos han logrado llegar a la sala principal de los hospitales después de que perdiesen de vista a Nathalie y Luka. Juleka quería despedirse de su mejor amiga por última vez, así que Adrien y algunas más han aprovechado ese rato para pedir a las de recepción que cargasen sus móviles sin batería aunque supiesen que no los podría cargar completamente.

Adrien al aburrirse de estar observando cómo su móvil va cargándose, se vuelve hacia Marinette, quien está hablando con Mylène sobre sus locos viajes que ha tenido recientemente.

-Marinette -la llama Adrien, aproximándose donde ellas.

-Bueno, yo voy a ir donde Alya porque... se me ha olvidado contarle una cosa -se excusa Mylène para dejarlos solos.

Adrien se sienta en el sofá donde está Marinette y la mira fijamente.

-Mmm... ¿cómo... estás? -pregunta, nervioso.

-He estado mejor -contesta con sinceridad, recordando que París pronto acabará destruyéndose completamente mientras que Nathalie y Luka estarán perdidos alrededor de Río de Janeiro.

-Sé que todos estamos pasando por una racha difícil pero sé que podremos lidiar con ella de algún modo.

Marinette alza la vista y en un vistazo rápido cree haber visto a Alya, Mylène y Alix mirarlos fijamente pero ahora parecen concentradas en sus conversaciones.

-Aunque no lo parezca, desde que yo y Chat Noir hemos sido superhéroes, solo hemos empeorado la situación porque ahora Gabriel y los demás aprovecharán estos momentos para destrozar la ciudad, ya que ambos no tenemos los prodigios -dice Marinette, cabizbaja.

Adrien gira su cabeza, pensativo. No se le ocurre qué decirle a Marinette para calmarla o al menos animarla, por lo que se limita a quedarse en silencio. Está seguro de que Alya o cualquiera de las demás chicas sabrán hacer sentir mejor a Marinette, ya que no dejan de echarles un vistazo de vez en cuando para ver lo que ambos hacen. Adrien ya no es el ciego de antes, por lo que ya se da cuenta de las situaciones en las que Alya, Nino y los demás le han hecho pasar a Marinette y a él de vez en cuando. Lo bueno es que Adrien, de alguna forma, no se arrepiente de ello.

-Chicos -dice Alix, acercándose a Adrien y Marinette-, ha regresado Juleka y...

Marinette intuye lo que Alix quería decirles, así que, interrumpiendo a Alix, da un pequeño salto de su asiento y se aproxima donde Juleka para ver cómo está.

Adrien procede a hacer lo mismo, tras ver que las cosas no están yendo muy bien.

-¿Juleka? -pregunta Marinette, colocando sus manos en los hombros de su amiga para confortarla.

La amiga emo de Marinette, se queda en silencio, sin hacer ningún movimiento brusco. Parece estar en sus pensamientos, sin estar escuchando a nadie. Ninguna de las personas presentes sabe qué hacer para mejorar la situación.

 Ninguna de las personas presentes sabe qué hacer para mejorar la situación

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La Guardiana LadybugWhere stories live. Discover now