✨️DAYDREAMER✨️ [ JHS +18 ]🔞

17 💦La isla

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Los capítulos que junto a su nombre lleven 💦 tendrán contenido predominantemente maduro y explícito . Si esto te incomoda o no es de tu agrado, te aconsejo saltearlos.

Si es de tus partes favoritas de Wattpad, como es mi caso, enjoy. 

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Hobi cerró la puerta tras nosotros, y como la primera vez que vino a mi casa, me encontré con sus ojos y sonrisa mirándome a través del espejo sobre el zapatero, y se sentía tan bien. Se sentía como si estuviera haciendo exactamente lo que tenía que hacer, con la persona con la que tenía que hacerlo. Se sentía como seguridad, y esa sola sensación me abrazaba hasta el alma.

Como si ya fuese una costumbre, se puso las pantuflas rosas y no pude evitar darle un besito tierno.

- Voy a ponerme mis pantuflas y vuelvo - Le dije, pero me abrazó por detrás antes de que pudiera dar más de un paso, pegándome de nuevo a su cuerpo.

- Ñiooo - Dijo con voz tierna, y comenzó a salpicar mi cuello de besitos.

- Dos minutos, voy y vengo - Dije riendo medio embobada.

- Uno - Respondió dándome una palmadita en el trasero.

Salí corriendo escaleras arriba, dejando escapar risitas a mi pasó. Me volvía loca que pudiera ser tan asertivo y salvaje, y a la vez tan tierno y adorable.

Entré a mi habitación a toda velocidad, y en un instante de claridad decidí sacarme las pantimedias y  cambiarme la ropa interior, pero cuando fui a mi closet a escoger panties nuevas, me lo replanteé.

¿Tiene sentido ponerme algo que espero que termine tirado por algún lugar de mi casa más temprano que tarde? ¿Sería demasiado si no me pongo nada y me quedo solo con mi vestido?.

Me calcé las pantuflas blancas de gatito y me miré al espejo. Tenía puesta una media polera color crema debajo de un solero negro ajustado hasta la cintura, y con un ligero vuelo desde allí hasta unos centímetros sobre mis rodillas. Me sentía muy linda, y agradecí mentalmente a mi yo del pasado por haber invertido en depilación definitiva.

Con una renovada sensación de seguridad y audacidad decidí arriesgarme y bajar commando.

Hobi estaba en el living, acariciando a la Bebesa que estaba panza arriba sobre su torre de rasguidos. Sonreí ante esa imagen, que parecía salida de esas fantasías que alguna vez me parecieron imposibles.

- ¿Qué te parece si armo una picada rápida con algunas cositas que tengo en la heladera? - Le pregunté, apoyando el costado de mi cadera sobre el respaldo del sillón. Se dio vuelta, dirigiendo sus ojos en dirección a mi voz, y vi como se relamía.

- Creo que estoy hambriento, pero no necesariamente de comida - Respondió ladino. Reí, y fui directo a la heladera - ¿Quieres que prenda el hogar? - Preguntó desde el living, refiriéndose a mi pequeño hogar a gas.

- Sí, sería genial. El control está en el cajón de la mesita - Respondí sacando distintos frascos y paquetitos de la heladera.

Saqué una tabla de madera y mármol del gabinete, junto con algunos cuenquitos y unos pinchitos metálicos dorados. Coloqué en los cuenquitos boconccinos, aceitunas griegas y una de mis conservas caseras de hongos.

- ¿Puedes abrir el freezer y elegir algunos panes? - Le pregunté a Hobi cuando entró a la cocina.

- ¿Y qué recibo a cambio? - Preguntó divertido, acercándose a mí.

- Una recompensa - Respondí, pícaramente, dándole un besito en la punta de la nariz.

- Trato hecho, bonita - Me sonrió.
Prendió el horno y puso a calentar los panes, mientras yo comencé a cortar algunos trozos de Gouda y acomodarlos sobre la tablita.