Vidas cruzadas: El ciclo. #3 COMPLETA. +18. BORRADOR

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Olivia acarició los hombros de Jonathan y se arrodilló en la cama a su lado para poder tirar de sus manos y que se enderezara. Lo abrazó y Jonathan no tardó en responder aferrándola con fuerza, dejó que llorara en su pecho y le acarició el cabello.

Quería poder consolarle, pero era difícil cuando su propia mente era un caos después de todo lo sucedido. Temía que cualquier cosa que dijera pudiera resultar como un detonante para Jonathan, que él lo malinterpretara y solo se sintiera peor y sabía que para ayudarle debía ser honesta, pero ser honesta podía terminar por empujarlo más profundo hacia la culpa.

—No eres un monstruo, Jona, yo no pienso que lo seas y quizás no soy la persona más indicada para juzgar eso porque te amo y jamás podré verte como un monstruo sin importar que hagas, pero estoy segura de que nadie que te conozca pensara diferente.

—Si supieran lo que he hecho...—. Apartó las mantas que lo cubrían y se sentó al borde de la cama—. ¿Me odias por querer morir?

El corazón de Olivia se encogió ante la pregunta y se arrastró sobre la cama hasta sentarse al borde junto a él. No sabía como responder a esa pregunta y escoger las palabras correctas en el proceso.

—Jamás podría odiarte, me duele que es muy distinto, pero no me duele por tu culpa, me duele porque no pude ver que estabas sufriendo —. Acarició su mejilla y peinó la barba que tenía—. ¿Qué te hizo estallar de esa forma? Estabas feliz porque habían encontrado a Hopkins y Ridley, al menos pensé que estabas feliz.

—Lo estaba —susurró y carraspeó con la intención de suavizar la comezón en su garganta. Ella le dio más agua—. Pero luego Kyle nos dijo que no podíamos matarlo y pensé en incriminarlos...Si Kyle no hubiera interferido habría matado a Lacy Good sin siquiera detenerme a meditarlo. Good es solo un muchacho que no ha lastimado a nadie, es un buen muchacho...En ese momento me di cuenta de que había cruzado una línea...Nada esta bien aquí adentro.

Sujetó su mano para evitar que se golpeara la cabeza y contrarrestar su fuera fue difícil. Forcejeó unos segundos sin éxito hasta que optó por sentarse sobre sus piernas y abrazarlo, estando en el camino, Jonathan dejó de golpearse por miedo a golpearla sin querer.

—Es mi culpa —susurró ella apretándole con fuerza—. Te he presionado...

—No, no, Olivia, no, jamás —. Sujetó su rostro para alejarla de su hombro y que no se ocultara y la miró a los ojos—. Tu has sido lo mejor en mi vida, lo mejor con creces y siempre has cuidado de mi con todas esas...esas cosas que sabes de la mente y...de...de terapia y no sé que más, fui yo...Yo me cerré, me cerré porque no quería...

Se interrumpió y tragó con cierta dificultad. Las lágrimas le formaban un nudo en el pecho y hasta respirar se le dificultaba. Olivia le acarició y unió sus frentes.

—Continua, Jona... ¿Qué no querías?

—Hacerte daño...Pensé que...Que si te contaba como me sentía te lastimaría y al final terminé lastimándote de todas formas —. La miró, con lágrimas en los ojos y se encogió de hombros—. No sé como reparar el daño que he causado, pero no es tu culpa. Jamás sería tu culpa.

Olivia sonrió cuando él tiró de ella para pegarse a su frente y ambos se limpiaron las lágrimas mutuamente. Lo besó, un pequeño beso al comienzo que se transformó en algo más y Jonathan acarició su espalda y se acostó en la cama con ella sobre su cuerpo.

—¿Quieres contarme como te sientes? —. Negó en silencio, con la vista fija en el techo y ella se acostó contra su pecho, escuchando su corazón—. Necesitas ayuda, amor, lamento no haberlo visto ante...Lamento no haberme dado cuenta, pero necesitas ayuda.