Un Infierno Sin Fin (William x Michael)

3

<Narrador: yo :)>

Michael se despertó con tremendas agujetas por todo el cuerpo, sobre todo por los muslos y brazos. Ayer se había esforzado demasiado.

-Mike mas te vale que estes despierto!- Gritó William desde la cocina.

Michael se levantó y se fue a preparar, se puso el uniforme y bajó a desayunar. Echaba de menos a sus hermanitos...

Se sentó en una silla y observo a su padre. William le daba la espalda. Cuando terminó de hacer el desayuno se giró y observo a su hijo con una ceja levantada.

Aun seguía triste por lo que le dijo ayer?

-Que te pasa.- Dijo William poniendo los paltos encima de la mesa para después sentarse enfrente de él.

-Cuando volverán Evan y Lizzy?- Preguntó Mike mirando su comida con tristeza.

-Porque lo preguntas? Con lo pésimo hermano que eres, no te echaran se menos..- Dijo eso y soltó una carcajada.
Michael se entristeció mas.

Ya no tenía hambre.
William se molestó, no había cocinado eso para que después no coma.

-Mike, escuchame bien! Cómete el maldito desayuno!- Dijo William dando un golpe en la mesa. Michael empezó a comer asustado.

William satisfecho bebió de su taza de café mientras seguía leyendo el periódico.

Al terminar de desayunar, se dirigieron al trabajo. Una vez ahí William pensaba otro trabajo para el menor. Ya estaba todo limpio.

-Hmm... Ponte un delantal y ayuda a Carl en la cocina.- Después de darle una misión al adolescente se retiró. Michael se quedó ahí quieto mirando como su padre se iba.

-No pierdas el maldito tiempo y traeme un café!- Gritó William haciendo que Michael se mueva rápidamente.

Corrió a la cocina y se encontró con Carl. Estaba horneando unas pizzas.

-Hola mike.- Dijo Carl con un tono de voz tranquilo.

-Papa me ha dicho que te ayude en la cocina y que le traiga un café.- Dijo Michael bastante rápido, desgraciadamente, Michael no sabía cocinar, ni su madre, ni su padre le había enseñado a cocinar.

-Bien, necesitas ayuda con el café?- Preguntó Carl acercándose al adolescente.

-Porfavor.- Dijo Mike juntando sus manos. Escuchó una risita y notó como le desordenaba el cabello.

-Entonces empecemos.- Carl, agarró la mano del menor y le acercó a una máquina de café. Le enseñó como funcionaba la máquina y le ayudó.

También le puso hielo a la quemadura que se hizo con agua hirviendo. Un error estúpido...

Después de ponerle una venda, le dijo que se llevara el café a la oficina de William. Estaba tan orgulloso de el café que había echo, pensó que a su padre le encantaría también.

Abrió la puerta y se acercó al mayor.
Henry también estaba ahí.

-Porque has tardado tanto?- Dijo William agarrando la taza. Mike miraba ilusionado como su padre daba el primer sorbo.

Notó una mirada de asco.

-Dios! Mike! Que porquería es esta?!- Gritó William haciendo que Michael se asuste.

-Sabe solamente a agua!- Siguió criticando el mayor. Michael bajó la cabeza apenado.

-No puedes hacer nada bien! Eres un inútil!- William agarró la mano vendada de su hijo y derramó el caliente café en la quemadura de Michael.