Un pequeño cambio... una sola acción... la cosa más simple e insignificante que podrías imaginar, fue capas de cambiar todo y de dibujar un nuevo camino.
Un nuevo sendero, una nueva vida... un nuevo destino.
Fanfic basado en la saga de juegos "Littl...
Perdón si m tardé tanto, pero estaba un poco complicado teniendo en cuenta que no sabía cómo exactamente desarrollarlo.
Además, quise ver si me podía superar un poco, queriendo actualizar todo lo que estoy haciendo... pero no pude. Me di cuenta cuando le metí como 8 dibujos a otras tres partes del AU en Insta.
Pero al fin. Le quise meter algo de producción y edité los benditos dibujos. Y hasta ahora, el que más dibujos tiene.
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- Hmmmm... - estás tirado boca arriba en el suelo. Ya estás cansado
¿Para qué levantarse?... Si ya sabes dónde estás.
Tus parpados se sienten pesados. No estás ni enojado, ni triste. Solo... estás ahí. Ya no sabes que se supone que debes de sentir.
Deben de haber pasado un par de días, pero te es imposible determinarlo. Todo en esta habitación es muy raro. Las paredes se ensucian, los pedacitos de pintura se caen y llenan el suelo gris y espero.
No sabes ni cómo te vez, solo sabes que te sientes terrible. Te duelen los pies y los ojos.
- Thin... quiero salir... por favor. – dices, sabiendo que nadie te escucha – Quiero ver a Carl, a Ann, al Doc. –
Si tan solo él estuviera aquí.
"Estas triste... yo lo sé. Déjame ayudarte... por favor"
... ¿En serio?... Ya basta, deja de perder el tiempo. Él no va a regresar.
Sin mucho que hacer, te sientas y miras a las paredes. Los ojos aparecen de nuevo. Ya no te da miedo, al menos, te hacen sentir menos solo en esta habitación.
Te fijas en uno en particular, no puedes mirarlos a todos. Es extraño, te gustaría saber si piensan, si hablan.
Si no hablan contigo... ¿hablarán con Thin? ¿Entre ellos mismos?
¿Serán una sola entidad? Cada ojo... ¿representará a alguien?
Siempre que Thin mataba a un televidente y lo hacía polvo, una parte lo absorbía él... pero la otra flotaba e iba a la torre.
Los miras de nueva cuenta. No se ven agresivos, no al menos estando en las paredes. Los ojos suelen mostrar emociones, o al menos eso es lo que entiendes. Estos ojos... no se ven enojados, o asustados o sorprendidos.
Te pones de pie, por primera vez después de mucho tiempo. Empujas la silla cerca de la pared, ubicándola justo debajo de una de las tantas masas de carne. En el espacio que seleccionaste, yace un ojo muy grande. No es tan grande para que sea gigante, pero tampoco es un ojo chiquito. Es más o menos del tamaño de tu cabeza, un poco más grande.
