Little Things (Little Nightmares)

Rarezas

Si ven raro este capítulo, es el autor que anda con la cabeza en la cola y ha perdido la razón.

#prayforelpendejoquescribesto.

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POV Narrador

- ¿Listo Mono? – preguntaron Carl y Thin.

- ¡Siiii! – dice emocionado el niño.

Entonces entran ambos hombres, empujando un carrito, el cual dirigen hacia la cama donde está Mono.

- Okey Mono, que sepas... que aquí nadie es chef experto y puede que sepa bien culero, pero fue hecho con cariño... y sin sangre ni viseras... -

Mono está feliz y dando saltitos, le dijeron que le llevaban un obsequio especial y esta ilusionado.

- Okey Carl... destápalo... -

Carl respira profundo, quita la sabana que cubre la mesa móvil... revelando un pastel, o intento de pastel en el interior.

Describamos lo que es: dos panes redondos, rellenos con mermelada y caramelos, dicho conjunto está cubierto con chocolate derretido, chispas de colores, galletas de chispas de chocolates destrozadas y demás cosas, todo junto en una masa de dulce y pan.

- ¡Feliz cumpleaños! – dicen.

Mono se queda en silencio viendo tal monstruosidad, impactado quedó.

- Ya ves estúpido... te dije que eran demasiadas cosas... - le susurra Carl a Thin.

- Estúpido tú, yo te dije que lo esparciéramos mejor, fuiste tú el que quiso tirar todo de un putazo. –

Ya se iban a pelear... hasta que escucharon...

- ¡MONO! – gritó el doctor.

Él enano se tiró de cara a un lado del pastel.

- ¡Enano! – gritó Carl dramático.

Thin fue sacarlo rápidamente de la masa, para encontrarse con un Mono embarrado en chocolate.

- ¿Qué crees que haces? – preguntó Thin.

El niño se limpia la cara y responde.

- Es... ¡EL MEJOR REGALO DE MI VIDAAAA! – dice, dando vueltas por toda su cama.

Carl y Thin suspiran aliviados, todo el esfuerzo, la casi explosión de la cocina de la escuela, tres horas de peleas continuas, 15 disparos al aire, una grieta en medio de la cocina y un 70% de la ropa quemada... valieron totalmente la pena.

Mono está super feliz, dándolo todo contra el pastel, manchando sus manitos y sus mejillas de chocolate.

- A todo esto... Thin... - lo llama Carl.

- ¿Qué pasa? – pregunta el alto.

- ¿De dónde sacaste todo eso? Creí que no habías encontrado nada que no tuviera hongos o estuviese hecho polvo. –

- ¡Oh! P-Pues... ya sabes... em... por ahí... - dice nervioso.

Carl quería seguir preguntando, pero Thin cambió de tema rápidamente.

- ¡AH! ¡Mono! – lo llama.

- ¿Qué pasa? – pregunta el niño, que no deja de comer.

- El doctor tiene algo para decirte, ¿verdad? –

El Doc. asiente.

- Mono, espero que estés preparado para ir a visitar a tus amigos... -

- ¿Por qué? –