𝗱𝗶𝗲𝗰𝗶𝗼𝗰𝗵𝗼. blinded in lies.

445 45 22
                                    

Capítulo 18Cegada en la mentira

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Capítulo 18
Cegada en la mentira.


En todo el camino al hogar de doña ricachona, ella no ha dicho una sola palabra, al igual que yo. No tenía que decir nada, pero parecía que ella sí quería decir algo, solamente que no salía ni una sola palabra de su boca. Pude notar que sus pasos se están volviendo pesados, para ello, dejar de caminar, dándome la espalda y la miré despreocupado.

Capaz quería que la deje hasta aquí, que ahora que le doy interés era el mismo sitio en donde la locura me traicionó y acepté su psicótico juego de ser novios falsos. Los árboles se mecían de un lado a otro, permitiendo que algunas hojas cayeran sobre el suelo y algunas sobre nuestras cabezas. Era una escena que no podía evitar observar con una media sonrisa. El sutil crujir de las hojas bajo nuestros pies, el suave susurro del viento a través de las ramas, todo contribuía a crear una atmósfera de tranquilidad y belleza natural.


—Y-yo... Muchas gracias, Seungmin-ah.

—Qué extraño...—susurré para mí mismo, entrecerrando los ojos y mirando el suelo a mi izquierda.

—¿Qué es lo extraño?

—Desde que empezamos con todo esto, nunca me habías agradecido. ¿Por qué este cambio ahora?

—Tsch. Sabes por qué te agradezco, Kim Seungmin. Gracias por ayudarme con Hwang Inseo, en serio, muchas gracias.

—Lo habría hecho por cualquiera.

—¿Te molesta mucho él?

—Vamos, te llevaré a casa y luego me iré a la mía. Ser tu novio falso es mucho trabajo, Fresita. Necesito recargar energías, de lo contrario, no seré un buen novio para ti.

—¿Novio falso?

Apenas escuchamos una voz detrás de mí nos giramos, está la hermana de Fresa con sus ojos dispuestos en salirse de sus orificios y no le sacaba la mirada de encima a su hermana. Mientras que Fresita yace viendo el pavimento, sus manos se movían de un lado al otro, hasta que la voz de Eunji se vuelve a hacer presente.

—¿Qué carajos, Minha?

—Unn...

—¡¿Es verdad?!

—Házme el favor y no me grites, unnie. No actúes como si nunca te hubieras dado cuenta, Eunji, porque tú fuiste la primera en dudar de que yo salía en verdad con Kim Seungmin.

Y entonces, la mirada de la hermana de Fresita se posó en mí, como si esperara que hiciera algún gesto o dijera algo que contradijera lo que su hermana menor acababa de mencionar hace unos segundos. Sencillamente que no sabía qué decir, porque como le había dicho a Fresita desde el principio, en algún momento las personas en su vida y de la mía se darían cuenta de toda la farsa que ella había armado y que, por necesidad mía, también me arrastraría con ella.

—¿No vas a decir nada?

—No lo involucres, Eunji-ah. Yo lo metí en esto, así que ahorra cualquier sermón que quieras dar—respondió Fresa—. Aun así, creo que deberías irte, Seungmin. Necesito hablar con mi hermana sobre lo que acaba de descubrir.

Angels like you ; k. seungmin ✓Where stories live. Discover now