𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐓𝐖𝐄𝐍𝐓𝐘 𝐄𝐈𝐆𝐇𝐓
𝙨𝙚 𝙝𝙖 𝙥𝙖𝙨𝙖𝙙𝙤 𝙖𝙡 𝙡𝙖𝙙𝙤 𝙤𝙨𝙘𝙪𝙧𝙤
Al día siguiente, a las 8:00 de la mañana, Obi Wan tocó a la puerta de mi casa. El día anterior me había llamado y como me pilló de improvisto, me vio llorando y teniendo un ataque de ansiedad. Decidió que lo mejor que podía hacer era visitarme, y yo supe que ya no le podía esconder más lo de mi embarazo.
Me quite las lágrimas de las mejillas que habían estado rodando de mis ojos toda la noche, y me acerque a la puerta. Ya me daba igual que Obi Wan o el consejo se dieran cuenta de mi embarazo, algo muy malo le había pasado a Anakin, y tenia que averiguar el que.
Abrí la puerta y al instante corrí a abrazar a Obi Wan. El correspondió por unos segundos, hasta que se apartó de mi confuso y me miró de arriba abajo, y cuando se dio cuenta de mi embarazo de ya 8 meses, abrió los ojos como platos.
-Layra, ¿que..? - empezó, pero yo no le contesté. Me limité a empezar a llorar tapándome la cara con las manos -
-L-Lo siento muchísimo, Obi Wan. Perdoname. Perdoname por no contartelo antes - llore - E-Estaba muy asustada y no sabía que hacer, asique la única solución que se me ocurrió fue esconderlo por un tiempo...
-Espera, ¿por eso dejaste los entrenamientos? - me preguntó Obi Wan, muy preocupado y yo asentí, sin dejar de llorar -
Mi maestro se acercó a mí y me volvió a abrazar, colocando sus manos en mi vientre y mirándolo con una sonrisa de medio lado.
-Layra, que sepas que no estoy enfadado, ni decepcionado contigo, si eso es lo que pensabas. Solo me ha sorprendido verte así después de tantos meses. Me alegro tanto de verte.
Yo sonreí con lágrimas en los ojos mientras nos volvíamos a abrazar.
-Supongo que después de esto me expulsarán de la orden Jedi, ¿no? - pregunté algo triste al separarme -
YOU ARE READING
With you - Anakin Skywalker
RandomAVISO: QUE TENGA POCAS O NINGUNA VISITA NO SIGNIFICA QUE LA HISTORIA SEA MALA, SINO QUE POCA GENTE LA HA DESCUBIERTO. Anakin Skywalker, un joven jedi elegido por la fuerza, es entrenado para convertirse en maestro jedi. Layra Shilter, una joven esc...