❈•≪12. Arena y primeros besos≫•❈

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Su acordado desayuno resultó dándose más tarde de lo que alguno de los dos previó, pero no pudo evitarse, se habían dormido con el sol abriéndose paso en el horizonte. Era obvio que ninguno despertaría con el sonar de sus respectivas alarmas.

Y es que al final, terminaron viéndose alrededor de las diez. Un detalle que nos les molestó, no era un mal horario y para entonces ya estaban bien espabilados aún si no durmieron ni cinco horas. Los únicos que permanecían entre las sábanas en ese momento eran Yeong, JongHo y según MinGi le comentó; YunHo todavía se encontraba inconsciente en la suya. Los otros habían salido, o eso asumieron al no verlos por ningún lado.

Hallar un sitio donde comer algo no fue difícil, en realidad fue una tarea sencilla. Habían muchos recintos en la zona por los que podían optar; algunos eran coloridos, otros sobrios en su decoración. Franquicias reconocidas o restaurantes locales; las opciones eran diversas en todo sentido. Motivo por el cual no hicieron una elección inmediata y prefirieron observar.

En ese lapso su conversación no fue más que superficial, el clima era esplendido y lo mencionaron. El cielo se encontraba parcialmente despejado y el sol los acogía bajo sus rayos sin agobiarlos con su calor abrasador, por el contrario, hoy se había moderado. Lo que muchas personas agradecieron. Sumado a esto, estaba la brisa que los acariciaba de forma continua; era refrescante. Un alivio genuino para sus pieles.

Varios minutos después, ambos escogieron ingresar a Tandem Coffee Club. Su fachada era simple a comparación de otras pero su interior amplio con los adornos justos y la estética minimalista fue lo que los atrajo. Porque tampoco es que tuviera una gran vista, y si Kim tenía que ser honesto, diría que era insípida. Sus largos ventanales daban a la calle concurrida o a un estacionamiento con apenas cuatro vehículos. Completamente sin gracia, no obstante, el menú y los precios que ofrecían estaban bien equilibrados. Invitaban a que se los probara.

Y para cuando realizaron sus pedidos y éstos eventualmente llegaron, es que su conversación dejó de ser banal para de manera natural girar entorno a temas que tuvieran que ver con la otra parte. Desde aspectos que podrían etiquetarse como insignificantes a aquellos que no lo eran tanto. Igualmente, cada mención que hicieron les sirvió para conocerse todavía más.

Por ejemplo; aprendieron sobre sus colores favoritos, las comidas que les gustaban y las que no. También comentaron algunas series que estaban viendo y aprovecharon para hacerse diversas recomendaciones. Tema que se extendió por varios minutos al darse cuenta que consumían contenido similar. Lo que fue agradable como estimulante al estar sus opiniones involucradas. Y llegados a un punto empezaron a compartir anécdotas de sus años en secundaria, como era de esperarse las que recordaban como graciosas fueron las protagonistas y a duras penas sí mencionaron un par de sucesos vergonzosos. Los que en realidad no fueron nada de otro mundo; llegadas tarde, caídas en público o comentarios desatinados que ajenos a sus amigos escucharon y no debieron. Vivencias que cualquier adolescente habrá experimentado y a ellos les hicieron reír en la actualidad al rememorarlas. Ese fue un momento entrañable, incluso cuando la conversación giró entorno a lo académico por unos segundos el buen humor no desapareció. Así descubrieron que ambos fueron estudiantes promedio que aún si tenían materias favoritas en las que eran unos entusiastas de primera, nunca resaltaron particularmente en ninguna.

Dialogar de sus antiguas amistades y de cómo acabaron con quiénes hoy los rodeaban, hizo que MinGi parloteara de YunHo sin parar. Bastante orgulloso de su mejor amigo con quien compartía un sinfín de intereses, aparte de una misma carrera y según le dijo en reiteradas ocasiones en esa verborragia que no parecía terminar pronto; llevaba conociendo casi toda su vida y la señora Jeong lo veía como un segundo hijo.

Su comportamiento fue divertido y algo encantador, aunque también le ayudó a aprender un poco sobre YunHo. La avalancha de datos que se le dio no le dejó otra alternativa y estuvo bien de todos modos, fue repentino pero informativo. El tipo de oscura cabellera era fanático devoto de Harry Potter, tenía varitas y se proclamaba miembro de una casa que el moreno no supo pronunciar y él tampoco conocía demasiado al respecto como para esclarecer dicha interrogante. Por lo que, se dijo, luego intentaría preguntarle. Supo también que le gustaban las golosinas, la comida en general y los videojuegos. Era alguien competitivo y tenía una suerte increíble. Estaba muy metido en el tema de los superhéroes y le fascinaban al punto de, en palabras del peliazul, dejarlo tonto.

Summer nights - [MinJoong]Onde histórias criam vida. Descubra agora