Capítulo VII

1.9K 246 44
                                    



Terminé de curar la energía de Yin y me senté en la silla cansado, cada vez era mas agotador hacerlo, sin embargo, no claudicaría hasta que mi alfa despertara y recuperara el control de nuestra manada -Ayer movió las manos, el médico humano dijo que era una reacción normal de su cuerpo, pero que su mente seguía dormida, dijo War limpiando el cuerpo de su pareja, con tanto amor que me hizo sonreír -Sé que pronto despertará, debe hacerlo.

-Sé que así será War, dije animándolo y suspirando, no sé si nuestro líder despertaría, pero la esperanza era lo último que debíamos perder -El sanador de la manada de Mew tiene ideas de tratamientos nuevos, así que de seguro lo lograremos.

-Te brillan los ojos cuando hablas de Mew, dijo mi amigo sentándose a mi lado y dándome un vaso de jugo - ¿Me quieres contar algo?

-Se está portando excelente con Milo, todos los días salen a jugar y corretear por ahí, el pequeño lo admira y adora profundamente, dije recordando lo emocionado que se ponía cuando el castaño lo iba a buscar para embarcarse en una nueva aventura.

-Veo que no sólo Milo está encantado con el lobo, dijo moviendo sus cejas de forma divertida y picarona - ¿Sigues amándolo?

Sin contestar asentí, el castaño en pocos meses se había robado nuevamente mi corazón, aunque si era honesto, nunca lo había recuperado de sus manos -Pero sabes que lo nuestro no puede ser, el tiene su manada y responsabilidades ineludibles, dije tratando de autoconvencerme y eliminar está esperanza que día con día crecía en mi pecho.

-El te dijo que haría lo que fuera por ustedes, ¿no le crees?, preguntó curioso mientras llevaba sus piernas a su pecho y se hacía pequeño en la silla - ¿Por qué no le das una oportunidad?

-Porque sé que el ama a su manada y puede haber cambiado y ser mas fuerte, pero nunca pondrá en peligro a su gente y créeme ellos jamás aceptaran que su alfa tenga de pareja a un felino, dije sintiéndome triste y frustrado, odiaba que las personas fueran tan prejuiciosas y discriminadoras -De hecho creo que se irá pronto, el sanador de los lobos me dijo que en la manada no miran con buenos ojos que el esté alejado de sus labores y mucho menos por ayudarnos a nosotros.

-Lo siento Gulf, tú mas que nadie mereces ser feliz, pero creo que la vida se ha empecinado en hacerte las cosas difíciles, dijo acariciando mi mano y mirándome con tanta tristeza que me dieron ganas de llorar -De seguro encontrarás a alguien que te haga feliz, aunque no sea él.

Sin contestar nada asentí, odiaba saber que tenía razón, pero mi corazón no quería a otro que no fuera él y eso no cambiaría, no cambió cuando hace cuatro años atrás pensé que me había botado de su vida, ni lo haría en el futuro.

-Iré a buscar a Milo, cualquier cosa no dudes en llamarme, dije colocándome de pie y saliendo del cuarto dónde mi alfa descansaba, con rapidez atravesé la mitad de la reserva y llegué hasta mi casa, dónde Mew hablaba por teléfono mientras veía a Milo jugar, curioso por lo que decía me acerqué con sigilo.

-No Tawan, me importa una mierda lo que digan, no volveré hasta que pueda recuperar a mi pareja e hijo, dijo de forma tajante a la persona con la que hablaba por celular, claramente estaba frustrado y molesto, pero controlaba su tono de voz, para no llamar la atención de nuestro cachorro -Gracias por cuidar de la manada, sólo espera un poco más.

Cuando colgó me acerqué a su lado y suspiré -Deberías volver a tu casa, tu gente te necesita, dije haciéndolo saltar por mi proximidad -No debes buscarte problemas por nosotros.

MiloWhere stories live. Discover now