El libro prohibido de BNHA (+18)

IZUKU MIDORIYA [TOXIC ESPECIAL]

me ha costado escribir esto que lo flipas. en plan ha sido como que muy complicado asdlkfjadlf

mira, he tardado tanto que me ha dado tiempo de leerme Normal People y parte de la narración está inspirada en la narración de ese libro. pero como lo terminé en medio de todo esto, la narración luego cambia JAJADSJFSAKLF

aún así, una parte del final ha sido bastante thrilling de escribirla muajajaj así que... 

spoiler: me he flipado un poco con las palabras

palabras: 18 586

finalizado: 9/10/2022

°°°

—Te reto a que beses a la persona con la que te gustaría acostarte ahora mismo.

E Izuku, ese chico inalcanzable del que nadie sabría decir si ha tenido sexo con muchas chicas o con ninguna, voltea su rostro para mirarme y me besa.

Mi amiga Mina, sentada enfrente de mí, frunce los labios y contiene una sonrisa. Lo hace mucho, eso de contener la sonrisa, y normalmente le sale bien; pero en esta ocasión es evidente cuáles son sus intenciones.

Llevo enamorada de Izuku des del segundo año de universidad. Yo creía que él no sabía quién era yo, que mi existencia era pura decoración en su gran mundo perfecto en el que todo el mundo se rinde a sus pies. Sin embargo, aquí se encuentra, mirándome con una sonrisa y una mano en mi mejilla.

Los presentes contemplan la escena con confusión. Es decir, soy una chica corriente de veinticuatro años con notas mediocres que se esfuerza en poder aprobar los exámenes y seguir avanzando. Sin ambiciones, sin un futuro claro, y decidiendo la cena de esta noche y no lo que hará cuando deje de estudiar. Me está bien una cosa como también me lo está la otra. 

¿Por qué Izuku, el estudiante más querido, querría tener sexo conmigo?

—Hecho. Siguiente —dice el pecoso, sonriendo mientras dentro de mí mi corazón está bailando de alegría y mi cerebro ha dejado de funcionar adecuadamente.

Cuando el juego termina, me siento en el sofá que hay cerca e intento aparentar que lo que me ha sucedido no me ha alterado, pero el movimiento frenético de mi pierna arriba y abajo me delata. 

Porque ahora sé que tengo una oportunidad de hacer algo con Izuku.

Me pellizco en el brazo por si acaso, por si todo esto no es un simple sueño.

—¿Te encuentras bien?

Izuku se deja caer a mi lado (¡a mi lado!) y se enrolla un cigarro. Chupa el papel y después saca un mechero; me mira un instante y me tiende esto último.

—¿Podrías encenderlo por mí, por favor?

Sin dudarlo dos veces, sacudo la cabeza y lo hago; su rostro se acerca al mío, aunque pienso que no habría sido necesario, y él roza intencionadamente sus dedos con los míos, alargando innecesariamente el toque, para después deslumbrarme con su sonrisa.

—Gracias. —Da una calada y se acomoda en el sofá, apoyando los brazos en la cabecera. Uno de ellos queda detrás de mi cabeza. Su pierna choca con la mía—. ¿Quieres?

—No, gracias —rechazo, tratando de sonar agradecida.

Observo sus labios atrapar la boquilla para después soltar humo por estos mismos limpiamente, inconsciente de que yo me ahogaría y de que tosería hasta devolver. 

No lo había visto nunca fumar. Es más, ni siquiera pensaba que él fumaba. Es decir, he escuchado rumores, cosas que la gente dice sobre el estilo de vida del pecoso. Sin embargo, nunca me he atrevido demasiado a creerme lo que se dice por el aire. Por alguna razón, sin embargo, la imagen de un estudiante brillante como Izuku dejándose llevar por el camino de la droga es algo atractivo.