19.

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JiMin aún se encontraba recostado sobre el pecho del menor, intentando regular su respiración agitada luego de ese tan placentero orgasmo. Los espasmos habían disminuido y el temblor de su cuerpo desapareció. Aún mantiene los dedos del castaño en su interior, lo que le hace gemir débil en algunos momentos, pues de vez en cuando estos se movían en su apretado interior. Sin darse cuenta, JungKook ya se encontraba besando sus labios, esto sin ser un acto lujurioso o que buscara calentar las cosas; era un beso suave y delicado, con muchísimo amor que era transmitido en los labios, lo que no duda en corresponder. Finalmente, los dedos salen de su agujero, soltando un último gemido entre el beso y luego se separa.

Ambos chicos parecieron estar dentro de su mundo porque, se asustaron un poco cuando se percataron que aún eran el foco de atención entre todo el grupo, logrando que las mejillas de ambos se pinten de rosa.

— Creo que alguien se emocionó mucho —bromea Nam, refiriéndose a JungKook, mostrándole una sonrisa perversa.

Por consecuencia, todo su rostro se tiñe de rojo.

— ¿Lo disfrutaste, Mimi? —cuestiona Jung, terminando por acercarse a gatas hasta su menor para ayudarle a ponerse al menos su ropa interior, pues por el orgasmo aún se encontraba desconectado del cuerpo.

— No, ¿tú crees? —responde con una pizca de sarcasmo el Kim de cabellos rosas, aprovechando para dejar una juguetona nalgada sobre los glúteos del pelirrojo.

Los demás sueltan una carcajada por aquello. El ambiente, además de candente, era bastante familiar y cariñoso. Eso les gustaba de estar los siete juntos, el pasar tiempo juntos era como sentirse en casa, a pesar de que todos vivan separados o de distintas familias, les gustaba estar juntos.

Una vez JiMin se encontraba vestido, todos vuelven a sus posiciones iniciales para que el juego continuara. Se estaba poniendo muchísimo mejor.

La botella comienza a girar como era habitual, apenas unos cuantos segundos bastaron para que la boquilla apuntara a un hermoso chico de acorazonada sonrisa. Salta de emoción porque ya llevaba un poco que no le tocaba más que ser un simple espectador. Ya quería ser el protagonista. Los demás ríen de su tierna acción, mientras que Jeon miraba el celular para leer el nuevo reto que le tocaría.

— "Hacer chupetón a la persona de tu izquierda" —habla el chico castaño, ahora apagando el celular para dejarlo a un lado.

— Oh —articula el retado.

Estaba, ciertamente, bastante decepcionado; no porque no quisiera cumplir el reto con NamJoon, porque claro que lo quería, pero esperaba algo tan fuerte como le pasó a sus dos menores. Un chupetón no era algo tan fuerte como masturbar a otro. Su sonrisa se fue decayendo de a poco. Las palabras no hacían falta, porque los demás supieron por qué se encontraba tan desanimado de pronto.

Kim se levanta e inmediatamente y sin dudar sus acciones, toma de la muñeca al chico pálido en ropa interior para que estuviera de pie también, casi arrastrando su pequeño cuerpo hasta el centro del círculo. Los chicos mantuvieron sus cejas fruncidas, porque no comprenden lo que estaba ideando el chico de tez morena.

— ¿Nos vas a dejar esperando? —Kim mira al chico de ojitos grandes, que no les había quitado la vista de encima.

Con la misma energía de siempre y, ahora con una hermosa sonrisa decorando su rostro, se levanta hasta posicionarse junto a ellos, casi soltando chilliditos emocionados.

Min es quien toma la iniciativa de tomar la camisa ajena para irla levantando tan lentamente, poco a poco su piel siendo descubierta por la tela hasta terminar está en el suelo. El ver su cuerpo semidescubierto era una gran fantasía y deleite para los chicos, porque adoraban cada parte de él. El cuello delgado aún estaba algo rojo con la marca de los dedos de SeokJin por el reto anterior.

— E-Esperen —pronto detiene Hobi, mirando a los dos chicos. — ¿N-No era yo el que debía hacer el chupón?

— Callado, Jung —ordena Min.

Tanto Kim como Min, se acercan hasta el contrario hasta tomarlo de su pequeña cintura con los brazos de ambos, cada uno escogiendo un lugar del cual marcarían como suyo. No fue tan difícil decidir. Los labios abultados de Nam fueron hacia su objetivo, el hermoso y delgado cuello rojizo, quería marcarlo de un chupón que quedase por varios días. Por parte de YoonGi, se había agachado un poco más para que su boca fuera hacia uno de los pezones erectos, debido al frío del lugar, para darle calor con su boca. Y, como si hubiera sido planeado, ambos impactaron al unísono con la piel, haciendo a HoSeok gemir de sorpresa por la húmeda y caliente sensación en su sensible piel.

Ambos hacian el trabajo a su manera, siento tan diferentes pero similares en el nivel de placer que le otorgaban al chico. Eran húmedos. Calientes. Mordelones. Apretaba. Comenzaba a doler y eso le estaba volviendo loco. La piel que era succionada empezaba a arder, por lo que un gemido ahogado se le escapa, mientras con sus manos debe sostenerse de los hombros ajenos para no caer de espaldas.

Los dientes se clavaban con mayor presión contra su piel, porque los dos chicos estaban decididos en marcarlo como se debe. YoonGi no paraba de clavar sus dientes, con tanta fuerza posible, su lengua se ocupaba de lamer tanto como pudiese, casi como si estuviera tratando de arrancarle la piel. NamJoon, por su parte, era un poco más sutil, porque en vez de morder tan fuerte, succionaba y lamía con algo de suavidad, pero con la suficiente fuerza para que la piel quedase de ese color violeta.

Los chicos admiraban ansiosos y con la espera de ver cómo quedaría su amigo.

Pasaron algunos segundos, en los que las mordidas de Min comenzaron a tener un sabor metálico y la succión de Kim logró poner bastante violeta su piel. Al momento en el que ambos se separan para admirar lo que habían hecho, sonrieron satisfechos y juntos chocaron sus manos. SeokJin se levanta para mirar de más cerca, ya que se encontraba a espaldas del pelirojo y al ver lo que ambos habían hecho sobre su menor, suelta un suspiro de dolor.

— Malditos salvajes, solo vean cómo quedó mi solecito —a modo de broma, golpea el hombro de los chicos, sus labios formando un mohín.

— ¿Cómo quedé? —pregunta algo agitado el retado, porque después de tantas sensaciones de las bocas ajenas en su piel, ya estaba muy acalorado.

— Eres una obra de arte y nosotros los artistas —habló Min, llevando los dedos de su huesuda mano para acariciar lo que se mostraba.

Dos hermosos hematomas. Una con una mordida sangrienta y roja. La otra violeta con una circunferencia rosa. Por supuesto, hechas con amor, porque si lo hubieran hechos muchísimo más cegados por la lujuria, su cuerpo estaría lleno de sus marcas que reflejarían el gran deseo que le tienen.








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Logré actualizar, soy feliz.
Pero bueno, espero este
cap les haya gustado.

Por cierto, les invito a
leer mi nueva historia,
también es BTSxBTS.
Misterio, humor, chats
e imágenes.

Me encantaría que la
leyeran, la llevo
escribiendo desde
mayo, gracias a mi
amiga que me super
alentó a realizarla.

Se llama: "Only For Text".

Lxs amo. 💜💜💜

Juego De Siete [BTSxBTS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora