Olor a neumático quemado, la histeria de la gente, motos rugiendo.......Todo por y para el Rey de las carreras de Clock Street, Emilio Osorio ó más conocido por Salvaje.
Una historia de dolor, pasión, amor, desamor mezclado con la ilegalidad, la ad...
Tras haber encontrado a su hermano, sano y a salvo, lo dejó en su casa. Cuándo llegó a Clock se lo encontró haciendo derrapes con la moto, así que el rizado se bajó de su vehículo, se apoyó en el capó de éste con los brazos cruzados y simplemente esperó a que su hermano se desahogase. Cuándo dejó de escuchar el sonido de las ruedas sobre el suelo esperó a que la gran humareda, que se formó alrededor, terminase y cuándo pasó se lo encontró llorando sobre el manillar. Hablaron durante un rato y después salvaguardando la moto, Emilio lo acompañó hasta su casa.
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Posteriormente, se dirigió a la suya en la que sabía que una conversación pendiente iba a ocurrir. Entró por la puerta del garaje y vió cómo el menor estaba en el sofá viendo la tele tapado con la manta.
- Ya estoy en casa - avisó Emilio
Escuchó cómo se limpiaba con un pañuelo y se giraba otra vez ofreciéndole una falsa sonrisa.
- Hola cariño
- Joaquín por favor, déjalo
- ¿Qué deje el qué Emilio?
- De aparentar que estás bien, te he visto en casa de Romina
Joaquín volvió a girarse, dándole la espalda y lágrimas empezaron a caer de sus ojos. Emilio escuchó cómo lloraba y se sentó a su lado abrazándolo.
- ¿Qué te pasa mi amor?
- No lo sé Emilio, sólo que no soy feliz - lo miró a los ojos - Cada día pasa una cosa nueva, primero tu cáncer, luego llega tu hermano perdido, tu padre me intenta operar a traición, después me apunta con una pistola en la frente, ahora conozco a Josh a través de un video en que dice que él sabía que érais hermanos - aspiró aire - Yo, simplemente no puedo con tanto
- ¿Y qué quieres que hagamos?
- No lo sé, hay veces que desearía volver atrás sólo unos años
- ¿Cuántos exactamente?
- Cuándo estudiaba, cuándo te conocí y empecé a ir a Clock. Cuándo no tenía ni puta idea de lo que pasaba en tu mundo, pero me sentía especial
- ¿Ya no te sientes especial?
- Ya no es lo mismo - admitió - Echo de menos mi casa, hablar con mis padres de todo
- Puedes hablarles de todo - Joaquín lo fulminó con la mirada
- Claro Emilio, le cuento a mi madre que tu padre me ha secuestrado y se queda tranquila. Pero espera, que luego le cuento que tu hermano recién aparecido que también es hijo de tu padre, intentó salvarme y también se queda más tranquila aún.
- No utilices la ironía conmigo, sabes que no la soporto Joaco
- Pues entonces no digas tonterías - susurró, pero Emilio lo escuchó perfectamente
