HORA DE LA MUERTE

28- Hora de los mellizos.

Lexie.

— ¿ahora que pasara?— pregunta Alex.

—Seremos tendencia por unas horas, la prensa nos seguirá masivamente por una semana, quizás más. Puede que nos olviden, o puede que no, y nos convirtamos en un icono, o nos odien o ambas - explica Lia.

—Eso suena malo - expresa Blue.

—Lo es, estamos en el ojo público, todo el mundo lo sabe, todo el hospital lo sabe y eso definitivamente es un problema - respondo tajante.

—¿Te molesta que sepan de nosotros?— ataca Alex.

—No, para nada, me molesta el hecho de que ahora la prensa se creerá con el derecho de opinar sobre nosotros, crear rumores y nuestra relación se convierta en un pase seguro para tener vistas o seguidores— explico – y lo que más me molesta es que paso aquí. Esas fotos salieron del hospital.

Ahora hablarán de nosotros solo para generar morbo.

Qué asco.

Ya he pasado por esto, y por mi experiencia puedo decir que hacer pública una relación monógama y heterosexual y que sea aceptada es mil veces más fácil que una relación hacerlo con una relación polígama, gay, queer, y la lista sigue y sigue. Es decir, si es una relación que la sociedad definida como normal, es más fácil, hay rumores y otras cosas. Pero no existe mayor cosa, puede que a la gente no le guste la relación por sus personalidades o porque son tóxicos, pero ellos son más propensos a ser aceptados.

Aun así tener una relación que claramente está muy alejada de lo que se espera es horrible. Todos se creen superiores, todos se creen con el derecho a decir si lo que haces está bien o no. Te tachan de cosas horribles, hacen movimientos de odio masivo, te desprecian con solo saber que no cumples con esos estándares, no se van el tiempo de conocerte o a tu relación, simplemente deciden odiarte, tienes que esforzarte mucho por no hundirte o que no se hunda tu relación. Lo peor es que no tienes que ser famoso para pasar por esas cosas, una relación que no tiene nada que ver con el medio también vive todo eso, ejemplo: una pareja lésbica caminando por la calle, de repente a una persona sin importancia tiene el impulso de gritarles que se irán al infierno o algo peor, ¿esto pasaría en una relación hetero? Jamás, y con esto, no quiero invalidar todo lo que conlleva sobrellevar una relación pública heterosexual, pero tenemos que ser realistas tienen mucha más aceptación por parte de la sociedad.

Como si no fuera poco, a pesar de que digan que te aceptan o que te entiende. En realidad no lo hacen por completo, jamás lo harán, siempre existirá un estigma, cierto rechazo, ciertos comentarios, y no los culpo, porque realmente todo esto es debido a como está estructurada la sociedad. El cómo se construyó a base de odio. Básicamente, la sociedad es un maldito asco.

Lo peor es que no puedo hacer nada respecto a quien filtro las fotos...

Pudo haber sido cualquier persona...

Un paciente...

Un acompañante...

Un paparazzi.

Literalmente cualquier persona.

Un teléfono vibra llenando el amargo silencio. Es el de Lia, no parece muy preocupada por ello...

—Si necesitas contestar— empieza Blue.

—No - niega aterrorizada. La miro extrañado ante su reacción— Esto es más importante.

—Seré sincero, esto claramente suena a que será un horrible dolor de cabeza, pero lo enfrentaremos juntos - Dice Blue.

—¿pase lo que pase?— pregunta Lia temerosa.

—Pase lo que pase, sea lo que sea, lo resolveremos y lo haremos juntos— respondo.