Kisaki fue atropellado por un camión... pero a diferencia de takemichi el cual rompe las leyes de la física al viajar en el tiempo. A Kisaki se le concede una oportunidad distinta, viajando al pasado de un mundo el cual no es el suyo.
¿Qué hará Kis...
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—¡Vamos, más rápido!— la instructora de kendo, Hirai Kasumi, movía con refinamiento y habilidad el shinnai, apesar de traer el incómodo kendogi puesto, bloqueando todos los ataques que Haruchiyo blandia con su bokken —¡¿Eso es todo lo que tienes?!— el choque de madera y madera resonaba más que los gritos de pelea.
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—¡¡Lo haría más rápido si usted no me atacara también, sensei!!— le gritaba Haruchiyo intentando esquivar pero fallando en el intento.
—¿Qué sería lo divertido sino lo hiciera?— pregunto sonriendo Kasumi-Sensei, teniendo a su pequeña alumna con la madera tocando la armadura que cubría su pecho —Vamos, levántate.— la Sensei le ofreció su mano. . . .
—¡Vamos Tetta! No te puedes quedar atrás.— el instructor de Hapkido guiaba los movimientos de Kisaki cada vez que golpeaba al otro alumno de Hapkido.
—Sensei, esto es complicado.— jadeaba cansada la pelinegra, mientras detenía el puñetazo de su compañero de prácticas para luego usar el impulso de ese golpe y derribarlo.
—¡Muy bien! Vas mejorando. . . .
—¿Estan bien mis golpes, Makoto-Sensei?— preguntó Hakkai aunque sabía que lo hacía bien, igual siendo ignorado por el sensei.
—¿Voy bien, Makoto-Sensei?— pregunto Chifuyu lanzando una patada al saco de arena.
—No te preocupes Chifuyu-Chan, ve a tu ritmo.— decía Makoto viendo la pequeña y delicada figura de la niña que intentaba darle una gran patada al saco de box sin caerse.
—Pero no me sale~.— la pequeña hizo un adorable puchero, Hakkai veia todo desde lejos, importandole poco y siguiendo con su entrenamiento.
—No te preocupes Chifuyu-Chan, yo siempre estaré para guiarte.— dijo Makoto, rodeado su brazo en la pequeña cintura de la niña mientras limpiaba sus lágrimas.
Makoto quería mucho a Chifuyu, Chifuyu le agradaba mucho Makoto.
El trato que Makoto le daba a Chifuyu siempre fue especial, siempre la consintió, la llevaba a comer helados mientras Tetta estaba en sus clases de piano, Hakkai lidiando con su hermano y Haruchiyo buscando que comer en las calles.
