CAPITULO 11

19 3 0
                                    

GISELLE
No puedo creer qué Jürgen este frente a mí no puede ser, nunca imaginé qué cuándo Stavros me dijo qué hoy vinieramos a cupido lo fuese a encontrar aquí, sabía qué Stavros le iba a enseñar la ciudad a un socio, o algo parecido, pero jamás pensé qué ese hombre fuese Jürgen Raskot, sino me hubiese negado. Mis piernas, y mi cuerpo temblaban literalmente cuándo lo ví frente a mí. Mis manos estaban heladas no podía evitarlo, su presencia me estremeció, revolvió esos sentimientos qué pensé tener sepultados, mi corazón volvió a la vida, dió un vuelco qué sentí qué sé saldría de mi pecho.
Estoy completamente muda, pero reacciono a tiempo no quería qué Stavros, ni nadie sé diera cuenta de qué lo conocía, aúnque por mi cara y mi actitud tuvieron qué haberlo notado. Salí corriendo literalmente, disculpándome con la excusa de ir al baño, pero me vine directamente a la barra tenía qué tomar algo, necesitaba alcohol en mis venas para intentar tener el valor de volver a la mesa, pero cuándo estoy intentando no derrumbarme aparece Jürgen a mi lado pidiendo un whisky al igual que yo!
-Giselle, susurra él yo estoy completamente petrificada, quiero huir, pero mis pies están completamente anclados al suelo, es cómo sí mi cuerpo no quisiera reaccionar por más qué mi cerebro le grite qué corra, él se niega dejándome atascada frente a Jürgen sin ningún tipo de opción. Jürgen me toma de la mano y siento un fuego que recorre toda mi piel, provocando qué mi piel se erize un sentimiento de dolor y a la vez de amor se atora en mi garganta.
Con su otra mano, me toma de la barbilla para qué lo vea a los ojos, esos hermosos ojos azules como el cielo qué hacen qué me pierda en ellos!
-Pequeña susurra y sin poderlo evitar mis lágrimas caen por mi rostro, él susurra atrapando mis lágrimas con su pulgar, por fin te encontré mi amor. Mis palabras están totalmente atascadas en mi garganta él me dice:
-No sabes cuánto tiempo llevo buscándote, jamás he dejado de buscarte, jamás he dejado de pensarte, no hay un sólo día qué no me vuelva loco por tenerte de nuevo entre mis brazos, pero en ese instante yo salgo corriendo y llegó a la mesa dónde se encuentra Stavros, no le doy tiempo a Jürgen de qué me retenga cuándo llegó Stavros al verme me pregunta
- ¿está todo bien Giselle? Yo estoy todavía abrumada por la presencia de Jürgen y sus palabras así qué no digo nada Stavros vuelve y repite:

-Giselle ¿cariño están bien?
Yo salgo de mi ensimamiento y respondo -sí rápidamente, sólo qué no me siento bien tengo un fuerte dolor de cabeza y malestar creo qué me dará gripe! Lo mejor es qué me vaya, cuándo estoy tomando mi bolso Jürgen se para a mí lado y dice señorita Giselle la acabo de conocer y ¿tan pronto se va?
Mi voz se niega a salir de mí boca, pero Stavros responde por mí. -Mil disculpas amigo es qué al parecer Giselle cogió un resfriado me está diciendo que no sé siente bien, y qué va a irse a casa!
-¿No te molesta qué la lleve a casa? es qué no quiero dejarla ir sola dice Stavros. Yo respondo no es necesario quédate con el sr Raskot, y los chicos yo estaré bien sólo es un dolor de cabeza, mañana nos vemos en la oficina. Stavros me besa en la frente y dice por favor avísame apenas llegues a casa. Jürgen me observa con una mirada fría, pero yo hago gestos con la mirada porqué sé qué sino lo hago irá detrás de mí!
Salgo rápidamente luego de disculparme con todos y arranco en mi auto, cuándo llegó a casa entro sin hacer ruido las niñas están dormidas, hoy mi tía se quedó cuidandolas aquí, me quito la ropa rápidamente y me meto en la tina,Dejo qué él agua caliente se lleve toda la tensión acumulada en mi cuerpo, mi mente no deja de pensar en Jürgen, nunca pensé ni en mil años encontrarlo está noche frente a mí. Y mi estúpido corazón me traicionó, latió desbocado cómo cuándo estábamos juntos aúnque él nos hirió el traicionero de mi corazón parece haberlo olvidado, se niega a obedecer, se resiste aún a mi mente obligando a mi cuerpo a quedarse cerca de él!
No entiendo cómo este hombre puede hacer qué mi mundo se estremezca de esa forma, es cómo si fuese imposible para mí cuerpo y corazón no amarlo, deseándolo con todo mi ser! Salgo de la tina, me acuesto desnuda y me arropo intentaré dormir, mañana tengo qué darle una explicación a Stavros, sé que él no me creyó qué estaba enferma pero lo aceptó, por el momento ahora tengo qué pensar qué excusa darle qué sea creíble para él. No puedo dormir mi mente me traiciona, mis recuerdos llegan, todo lo que Jürgen y yo hemos vivido se hace presente en mis pensamientos, no dejó de recordar sus besos, sus caricias todo lo qué quiero y deseo es tenerlo frente a mí otra vez. Mi corazón lo pide, mi cuerpo lo necesita, mis labios lo reclaman él es cómo una droga qué necesito para vivir! Nadie ha logrado qué lo olvide, es cómo sí mi corazón se negara a sentirse vivo con alguien más, cómo sí mi cuerpo refunfuñara ante la idea de qué alguien más lo toque, alguien qué no sea Jürgen Raskot. Demonios estoy completamente perdida, ahora no sé cómo escapar de él, o mejor dicho no sé sí quiero en verdad quiero escapar, mi cuerpo se niega a alejarse nuevamente de él, me levanto y me dirijo al mini bar qué tengo en mi sala saco una botella de Vodka y empiezo a beber, no es mi costumbre hacerlo mucho menos cuándo debo trabajar mañana, pero necesito relajarme para dejar de pensar en Jürgen sí es que eso es posible!

-Auuu me duele la espalda, Diablos ¿por qué está cama está tan dura? Cuándo abro los ojos lentamente me doy cuenta qué no estoy en mi cama, sino en el piso de la sala, rayos me quedé dormida ¿qué hora es ? Cuándo veo la hora son las 3 AM, estoy todavía mareada me voy a la cama pongo la Alarma y me duermo enseguida!
El sonido de la Alarma me despierta, pero mi cabeza sigue girando me duele mucho! No debí beber anoche murmuro! Me baño, me visto y bajo a la cocina, mi tía me está preparando el desayuno la saludo buenos días tía Adriana.
-Buenos días Cariño responde ella!
-Hoy no desayunare digo sólo necesito un café!
-Creo qué antes de eso debes comerte un tomate -¿Un tomate?
-Sí para qué te quite la resaca y puedas ir a trabajar. Está bien como el tómate y me despido diciendo, el transporte de las niñas llega a las 7 en punto tía que las niñas estén listas.
-No te preocupes cariño yo me encargo de eso.
-Gracias, eres la mejor y beso su mejilla
-Te veo luego! Al llegar a mi oficina cierro la puerta rápidamente, mmmsss suspiro con este dolor de cabeza se me olvidó pensar en qué excusa le daré a Stavros cuándo llegue de pronto suena mi teléfono, cuándo veo el identificador de llamadas es Argenis!
-Hola Argenis, respondo.
-Hola hermosa tiempo sin saber de tí, Lo siento digo apenada es qué he tenido mucho trabajo!
Sí lo supuse, responde él yo también he tenido mucho trabajo pero por fin he logrado desocuparme de unos casos porque quiero viajar a España quiero verte y a las niñas. Yo intento hablar pero mi voz se atora en mi garganta!
-Bueno, yo he bueno,
¿Qué pasá? dice él -Bueno Argenis no es el mejor momento tengo demásiado trabajo y no tendría tiempo para tí espeto. -¿Bebé no quieres verme?
-No es eso Argenis, tú sabes cuánto significas para mí pero.
-¿Pero qué? Dice él, pero acabo de ver a Jürgen aquí en Madrid y no creo qué sea el momento indicado para qué estemos juntos de nuevo, necesito tratar de no volver a verlo y apenas sepa qué estás aquí tendrá la forma de volver a encontrarme.
-Giselle yo nunca le diría dónde estás.

-Eso lo sé, Pero él si debe saber a dónde encontrarte, sólo dame unos días y nos vemos por favor! Yo también quiero verte, eres mi amigo! Está bien Giselle, refunfuña él cómo quieras, pero si en máximo dos semanas no me das razón de ti, igual viajaré no soporto un minuto más sin estar contigo.Sonrió y digo lo prometo, además yo también quiero verte, gracias por estar pendiente de mí eres el mejor.
-Argenis -¿qué? Dice él
-¿Sabes qué te quiero? -Sí preciosa yo también te quiero, cuelgo y de pronto se abre la puerta y salto del susto!
-Diablos Stavros ¿pretendes matarme de un susto? El sonríe y dice:
-Para nada preciosa!
-Pero sabes qué tenemos una conversación pendiente!
-Suspiró -¿sí ? Intento de hacer qué no se de que habla! Giselle!
-¿Qué? Espeto
-¿Sabes a qué me refiero? No, no lo sé titubeó!
-Ajá dice él, bueno ¿quiero saber por qué te fuiste ayer tan rápido del bar?
-Ya te lo explique Stavros no me sentía muy bien! Giselle! Gruñe él!

DAME TU AMOR de la biología Hazme Sentir.Where stories live. Discover now