Nos vamos a la habitación, y le pregunto a Jürgen —¿donde está José?
El está en España, internado en la clínica porque debido al impacto de bala sufrió una grave lección en la cabeza dejándolo en estado de coma.
Mis lágrimas ruedan por mis mejillas, —No te preocupes bebé ahora mismo voy a llamar a uno de mis hombres de confianza y le voy a encargar qué mañana mismo viaje a España y me mantenga al tanto de el estado de Salud de José. Yo dejé todo pago el día qué salí, pero con tu secuestro no había tenido tiempo de ir más, Jürgen llama enseguida a un tal Julián y le da instrucciones de viajar a España y qué apenas hablé con el doctor qué lo atiende le informe de manera inmediata. Bueno mientras él está al teléfono me cambio y me meto en la ducha Jürgen me sigue y dice —Amor no hubo un día donde yo no deseará bañarme contigo, ese siempre fue mi deseo. Nos duchamos y acostamos en la cama juntos lo abrazo y me duermo encima de su pecho estoy exhausta, él por su lado me abraza, quedándonos dormidos así.
Despiertos a las 7 Am, pero él es obsesivo no deja que yo me levanté me tiene abrazada. Trato de escabullirme besando su pecho, pero no me suelta cuando por fin me safo me meto en la ducha me baño y cepillo mis dientes, me coloco unos shorts cortos y un top deportivo a juego, me coloco unos zapatos deportivos y bajó a hacer ejercicio un rato. Al poco tiempo llega jürgen diciendo: —se puede saber con ¿permiso de quién te escabulliste?
—No necesito permiso digo: sólo vine a distraerme un poco el ejercicio me relaja lo sabes.
—A mí también, pero tengo otra idea de hacerlo.Pervertido jajaja río. —Y a tí te encanta.
—¡Ególatra! Digo lo beso mordisqueando y chupando sus labios con pasión.
JÜRGEN
Ven vamos a desacalorarnos para bañarnos y hacerte el amor qué tengo demasiados días sin sumergirme en ti, y necesito tu olor en mi piel, tú sabor en mi boca y tú nectar en mis labios. Al llegar a la habitación la desvisto, la tomo en mis brazos, llevándola con cuidado en la bañera, entro colocándome detrás de ella y empiezo a sentir su olor. Demonios está mujer huele delicioso aún estando sudada, levanto su cabello con una mano mientras mordisqueo su cuello, su piel se eriza enseguida, lamo y chupo dejando mi marcas en su piel, quiero qué todo el mundo sepa qué es mía y me pertenece. No hay nada, ni nadie qué lo pueda cambiar.
Bajo hasta sus hombros y los muerdo sus pecas en ellos me excitan más, es una incansable necesidad de tocarla, de poseerla, marcarla, y de amarla. Mi corazón late desbocado dentro de mí pecho, es una felicidad qué jamás había experimentado, algo qué temo qué sea sólo un sueño. DIOS mío jamás imaginé encontrar alguien qué tocará cada fibra de mi ser, cómo Giselle lo hace, es cómo sí toda mi vida hubiese estado muerto y hubiese recién vuelto a la vida.
Pensé qué el amor me hacía débil, pero eso sólo sucede si no es la persona correcta, con Giselle me hace fuerte, me hace querer cuidarla, protegerla, ser todo para ella, mi vida por fin encontró la pieza de rompe cabezas qué me había faltado durante tanto tiempo y lo peor no sabía qué estaba perdida.La saco de la tina después de bañarnos, la colocó en la cama y retiro la toalla su piel está erizada debido al frío del aire acondicionado. Aplico sobre su pezones un poco de Nutella, chupo y lamo incansablemente, voy colocando más bajo su pecho hasta llegar a su abdomen plano, lamo y chupo su ombligo ella intenta detenerme, saco las esposas y digo no quería hacerlo pequeña, pero aún no aprendes la lección.
Luego de atarla de manos y pies colocó más Nutella, pero está vez en su entrada lamo primero por la parte externa de su vagina, chupando y lamiendo, en la parte externa aunque pocos le dediquemos tiempo es una zona extremadamente sensible en la mujer. Lamo los labios de su vagina, sin profundizar sólo haciéndole sentir mi lengua y labios, luego empiezo a chupar con suavidad su clítoris , enfocándome en la parte superior la qué roza con la abertura de sus labios, este punto es muy sencible a la estimulación. Giselle empieza a gemir desesperada y suplicando susurra: —Jürgen amor te necesito dentro de mí.
—Lo siento pequeña pero aún no! Meto dos dedos dentro de ella, a la vez qué no dejó de chupar agrego un tercer dedo, concentrándome en su zona inferior tratando de tocar esa zona, dónde se desarrolla el orgasmo. Simulo la entrada y salida de mi pene con mis dedos a un ritmo no tan rápido, para qué ella pueda disfrutar de esa variabilidad de sencaciones, sin necesidad de forzar o fingir un orgasmo! Giselle llega al orgasmo en mi boca, lamo insesantemente hasta qué no quedé nada qué se pierda, luego la beso para que sienta su sabor en mí. Coloco una Almohada debajo de su columna para darle la elevación necesaria y Alcanzar su punto "G" con mayor facilidad.
La penetró poco a poco aumentando la velocidad, pero de manera progresiva de forma qué su orgasmo vaya formándose en su interior, no dejó de besarla para qué no se pierda esa conexión necesaria y pueda sentir en cada beso su respuesta a mis embestidas. Cuándo la siento contraerse dentro de mí, sé qué es la señal qué estoy tocando su punto "G" y comienzo a investirla con más fuerza, pero sin aumentar la velocidad, ya qué quiero qué la sensación se prolongue más y su orgasmo sea más intenso, Giselle comienza a gritar ahí, yo susurro ¿ahí pequeña? —y ella responde sí, esa es mi señal para liberar mi bestia y tomarla con más fuerza y rapidez logrando escucharla gritar literalmente de placer.
Ese es el jodido sonido más sexy y erótico qué he oído en mi vida. Mi orgasmo llega enseguida, pero me salgo de ella y colocó mi pene en su boca queriendo qué ella trague todo mi semen. Ella lame y chupa incansablemente, sin dejar escapar una gota, luego la beso en los labios.
—¡Te amo pequeña! Susurro en su oído, ella sonríe y me pide qué la desate, la desató y corroboró qué su piel no esté lastimada y su circulación sea normal, masajeo sus manos y pies la llevo nuevamente al baño y nos duchamos, nos vestimos y bajamos a desayunar. La tomo de la mano, y entramos a la cocina ya las niñas están sentadas listas para desayunar.
—Buenos días decimos.
—Buenos días mamita dicen las niñas, bendición , buenos días Jota.
—Dios las bendiga responde ella, —¿cómo están princesas les pregunto?
—Estamos bien jota, —me alegra.
—Buenos días Alicia saludamos. —¡Pensé qué ya no bajarían! —estábamos haciendo ejercicio digo yo.
—Está bien mis niños siéntense para que coman, desayunamos y escucho el timbre de la puerta.
—¿Alicia esperas a alguien? No! Responde ella. Cuándo abre la puerta la persona qué entra es Argenis. —Bendición Mamá. — hola hijo buenos días.
—¿Puedo pasar? —por supuesto, al escucharlo las niñas corren —hola Argenis!
—Hola mis amores, ¿cómo están? —Estamos bien Argenis.
—Hola saluda Argenis espero no interrumpir, —para nada dice Jürgen
—¿Cómo estás? dice Giselle —bien, bien, hoy llegué de España y quería saber ¿cómo estaban?
—Estamos bien, respondemos ambos.
—Se me olvidaba José está mucho mejor ya salió del coma, el doctor lo tiene en observación dijo qué sí seguía bien esta semana le daba el alta dice Argenis.
—¿Cómo qué José estaba en coma? pregunta Alicia.
—Es una larga historia Mamá digo.
—Argenis sé queda estupefacto y me mira
—¿O sea qué ya sabes la verdad ? —Sí ya Alicia me dijo qué soy tú hermano mayor Abogadito.
—Argenis me mira y dice: —eres un idiota, no me digas así.
—Oye soy tú hermano mayor y me debes respeto así qué no abuses.
—Bueno eso era todo entonces me ire dice Argenis. —No te vayas dice Giselle, quédate a almorzar con nosotros! Alicia dice: —necesito qué me digan lo qué le sucedió, no te preocupes mamá digo luego te explicaré pero no frente a las niñas.
—Y tú quédate a almorzar le digo a Argenis. —Pero aún es hora del desayuno dice Argenis.
