CAPITULO 27 JÜRGEN

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Aúnque al principio no tenía planeado enamorarme de tí, sólo eras una aventura me doy cuenta de lo equivocado qué estaba. En el pasillo nos encontramos con George e Isabella.
—Me alegra que estés bien dice George! —Tú también Hermano respondo, lo abrazo y se sorprende. —¡Oye esto sí qué no lo esperaba!
—¡El ogro tiene un Gran Corazón dice sonriendo. —George no hagas qué en vez de un abrazo te de un golpe en la cara.  —Oye, pensé qué me querías dice en tono burlón.
—Claro qué te quiero George eres mi hermano y por eso es qué te soporto, eres un idiota inmaduro y eso no es fácil aguantarlo.
—Oye soy la razón de qué tu vida no seas tan amargada dice George.
Salimos del Hospital y nos dirigimos directo al Aeropuerto, no quiero estar un minuto más aquí, quiero llegar a Venezuela. Giselle e Isabella buscan algo para comer, mientras George y yo compramos los boletos de avión, el vuelo sale en media hora, nos da tiempo de comer y luego nos subimos al avión Giselle y yo nos sentamos juntos obviamente y George e Isabella hacen lo mismo. Al llegar a Venezuela lo primero qué hacemos es buscar a las niñas.
Saludo a la Madre de Giselle y ella me abraza. —Qué bueno volver a verte Jürgen dice la señora Gladys. —Para mí también es un verdadero placer saludarle señora Gladys.
—Dime Gladys, dice sonriendo, —está bien, Gladys repito yo. Las niñas al verme me abrazan y gritan —"Jotaaaaa" —hola Princesas ¿cómo han estado?
—Bien jota dicen ambas extrañándote a ti y a mami.
—Bueno eso ya no va a pasar más dice Giselle, Porque Jürgen ¡no sé va a alejar más nunca de nosotras. ¡Mi corazón da un vuelco en mi pecho! No puedo creer lo qué escucho, me giro para ver a Giselle y ella me toma por la barbilla y me besa frente a las niñas y  su mamá.
—Guacala dicen las niñas. La señora Gladys se ríe, —¿cómo qué ya eres mi yerno? ¿O me equivoco?
Suspiro, y digo eso es lo qué me haría más feliz en toda mi vida.
—¡Pues ya puedes presumir dice Giselle riendo! —No dudes de qué lo haré desde este mismo momento digo con alegría, nos despedimos de su mamá, mejor dicho de mi suegra y salimos rumbo a mi casa.
Cuándo crees qué todo está perdido y qué tu vida sólo puede ir peor, DIOS te da una bella sorpresa y a mí me sorprendió dándome el privilegio de amar a esta mujer y qué ella me ame de vuelta. Llegamos a casa y las niñas bajan corriendo del auto y entran directo a la cocina.
—Alicia, Alicia, dicen ambas ya volvimos. Alicia al verlas las abraza y besa en sus cabezas. —Qué alegría volver a verlas dice ella, no saben cómo las eche de menos.
—¿Y buddy? Preguntan. —Debe estar durmiendo en el sofá de la sala dice ella. Ambas corren en busca del gato, Giselle y yo saludamos a Alicia ella al vernos empieza a llorar.
—¿Por qué lloras viejita?  ella me besa con ternura en la mejilla te he echado muchísimo de menos.
—mi niña no sabes cuánto te he extrañado a tí a las niñas también. Esta casa no es lo mismo sin ustedes, estaba muy triste. —no te preocupes viejita eso no sucederá más replico porqué Giselle y las niñas no se irán jamás.
—¿Es verdad? me pregunta Alicia —sí así es, nada ni nadie podrá separarnos lo prometo.
Su rostro se ilumina sin dejar de llorar! —No llores más por favor, dice Giselle sino no podré soportarlo y me verás llorar como un bebé y mi naríz se enrojece cuándo lo hago.
Abrazo fuertemente a Alicia y digo más nunca te dejaremos.
—¿Y Dónde está Argenis? Creó qué ya llegó aquí a Venezuela estaba con nosotros y gracias a él he vuelto!  —¿A él? pregunta Alicia, —Sí respondo y le cuento todo.
Alicia empieza a llorar aún más y dice: —¡creó qué ya es hora qué sepas la verdad Jürgen!
—¿La verdad?, —¿cuál verdad? —Creo qué es mejor qué me vaya dice Giselle.
—No es necesario mi niña, tú también eres parte de la familia ahora.
—Jürgen, primero qué nada quiero qué sepas qué sí nunca te dije nada, no fue porque yo no quisiera sino qué me fue prohibido decirte algo, sí quería permanecer a tú lado.
— ¿De qué hablas Alicia?, no te entiendo —bueno te voy a contar, cuándo era Joven me enamoré de un hombre muy atractivo, lo conocí en mi lugar de trabajo. Yo sólo era una niña, pero él sabía lo guapo qué era y me conquistó el problema era qué él era un hombre casado, yo no lo sabía de hecho me enteré fué cuándo ya era demasiado tarde. Ese hombre me utilizó porque quería tener un hijo y su esposa era Estéril, y me embarazó luego de qué quedé embarazada empezó a chantajearme, nunca me quiso sólo quería un heredero para qué él y su esposa lo pudiesen críar. Cuándo dí a luz, me dijo qué sino le entregaba al niño iba a matarme y además igual me iba a quitar mi bebé, qué lo más sano era qué renunciará al bebé y así podía permitirme verlo crecer aúnque no como su madre.
Mi cara se transforma —ese hombre era un monstruo digo. —Sí Jürgen era un lobo con piel de oveja y ese lobo era tú papá. Él me embarazó y luego me obligó a qué renunciará a ti, para que él te pudiese críar junto con su esposa.
—O sea ¿qué mí papá te embarazó ¿y yo soy ese hijo? —sí Jürgen dice Alicia tú eres mi hijo, por eso renuncié a criar a Argenis, porque yo sabía qué pensabas qué toda tu familia había muerto y me necesitabas por eso decidí dejar a Argenis al cuidado de mi hermana y decidí cuidarte para siempre, además ya habías sufrido demasiado.
Yo, no logro emitir palabras sólo puedo pensar en qué toda mi vida lloré por el amor de una madre qué nunca tuve, cuándo en realidad nunca me abandonó. Y sí mamá era Estéril ¿cómo quedó embarazada? —por miles de tratamientos esa niña iba a ser la primera hija biológica de tú madre. Tú padre nunca me amó, la única mujer a la qué siempre amó fue a tu madre, yo para él sólo era el medio de conseguir un heredero.
¿Giselle interrumpe exclamando Argenis es tú hijo? —Sí dice Alicia.
—Y ¿por qué renunciaste a criar a Argenis por mí? ¿Por que no nos críaste juntos?
—porque mi esposo el papá de Argenis fué él responsable de la muerte de tus padres, él era el conductor ebrio qué se salió del carril y no quería qué odiadas a Argenis por eso. El papá de Argenis nunca bebía, el lo hizo fué porque se enteró de qué tu padre y yo habíamos tenido un hijo y en vez de preguntarme o discutirlo se puso a seguirme y vio cuándo tú padre me amenazaba y creyó qué yo estaba enamorada de él y lo engañaba, por eso ese día salió y no volvió más, cuándo supe otra vez de él ya estaba muerto al igual qué toda tú familia. Por eso mantuve alejado a Argenis no quise qué lo odiaras cuándo te enteraras quién era su padre .
Yo me quedo en silencio un momento respiro y digo: —No tienes porqué llorar más Alicia has sufrido demasiado para qué lo sigas haciendo, además comprendo porque nunca dijiste nada. He de imaginar lo díficil qué ha sido todo lo qué has sufrido teniendo a tú hijo lejos de ti y a tú otro hijo cerca, pero sin decirle qué eras su madre. En otro momento me hubiese costado más asimilarlo, pero después de todo lo qué he vivido he aprendido a apreciar las personas qué están en mi vida. Ahora le doy gracias a DIOS porque tengo a mi madre viva y conmigo, siempre fuistes una madre para mí y ahora que sé qué eres mi madre biológica agradezco a DIOS está oportunidad..

—Ya nunca más estaré sólo. Alicia llora aún más! Diciendo —pensé que nunca te oíria llamarme así.
— Bueno acostumbrate, porqué así te llamaré siempre porque eres mi Madre a la que le debo la vida.
O sea eso te convierte en él Hermano de: —sí en el hermano Mayor de Argenis digo. ¿Y él lo sabe? pregunto a Alicia. —Sí hijo, hace poco se lo dije justo cuándo Giselle se fue de aquí hace unos meses.
—Demonios! Auch lo siento Alicia no quería que sonara así. —no te preocupes mi niña es una larga historia prometo contarles todo con más detalles, bueno supongo que están cansados, les prepararé la comida para qué puedan descansar.
—Yo no tengo hambre dice Giselle.  —Yo tampoco respondo, pero sí te acepto un café con leche y pan dice Giselle yo igual digo.
—Bueno vayan cambiándose mientras yo preparo el café y un cereal para las niñas.
Cuándo subimos los nombres de Aby y Alish están grabados en cada cama individual sonrió y digo no debiste molestarte. —No me molesta! —Eres perfecto digo.
Giselle me besa y las niñas entran corriendo a la habitación. —Bueno señoritas hora de bañarse dice Gisell, después de bañarse comen unos sándwiches y cereal  Giselle y yo las llevamos a la cama. — bueno ahora sí a dormir.—Hasta mañana dicen —hasta mañana Princesas.

DAME TU AMOR de la biología Hazme Sentir.Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz