Capítulo 3

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1

—Qué hijo de puta sos ¿Cómo pudiste? —le dice Walter a Iván mientras vuelven camino a sus hogares.

—Y ahora ¿qué hice?

—Te dije bien que no le digas que te lo pedí yo. ¡Lo grité!

—Vamos, ¿qué podía hacer? ¿pedírselo como si fuera para mi? Fíjate que no, imagina que se ilusiona conmigo luego, no podría causarte yo semejante maldad.

—¡Cállate! —exclama Walter alterado mientras patea frenéticamente a Iván.

—¡Ya! ¡Pará! —se intenta cubrir de las patadas y cuando Walter se calma, continúa—. Mira el lado bueno, tenés su número, y ahora sabes su nombre.

—Hablando de eso, aún no leo el papelito, ni sé su nombre —dice deteniendo su paso al llegar al frente de su casa.

Entonces saca de su bolsillo el papel y lo abre cuidadosamente entre sus dedos, la chica que lo trae loco se llamaba "Luz". Se le ilumina el rostro y le brillan los ojos.
Guarda el número en su celular y vuelve a poner el papel en su bolsillo. Sonriendo se despide amablemente de Iván y entra a su casa como caminando en las nubes.

2

Lo espera su padre sentado en la sala, son las diez y media, un regaño de quince minutos sobre la responsabilidad y lo manda a dormir, a pesar de todo esto nada puede perturbar su felicidad esta noche. Es de aquellas noches en las que duermes con una sonrisa, tienes sueños agradables, la temperatura es perfecta, y parece que de repente el universo entero conspira en tu favor.

Duerme tan plácidamente que la noche pasó al vuelo y al amanecer, como pocos días, Walter puede despertar feliz, es la primera vez que siente ganas de salir, lleno de ganas y ánimos decide visitar a Iván para recabar más información sobre Luz.
Llevaba puesta una camiseta amarilla polvo, pero se la cambió por una verde agua, es que la amarilla tenía un color "sucio", en sí no estaba sucia, era el propio color de la camiseta la que hacía que se viera así, y Walter es un obsesionado por estas cosas. Desayuna a las corridas y sale.

Ya cuando llega a casa de Iván, toca el timbre y sale él a recibirlo con gran sorpresa. ¡Es Walter! ¡Ha salido de su habitación! Y aún más ¡Sin invitación! 

Es todo un acontecimiento, así que apurado trae dos sillas, con un equipo de tereré -que es una bebida típica de Paraguay, una jarra de agua fría con algunas hierbas refrescantes y una especie de vaso de madera llamada "guampa", con yerba mate dentro y para sorber el agua una bombilla que filtra la bebida de los pedazos de yerba, y bla, bla, bla, para saber más revisar wikipedia-. Prosiguiendo, se ponen a hablar de la fiesta de la noche pasada, especialmente de la chica.

—Luz es hermosa, jamás había visto una chica tan bella, su cabello, sus ojos, su figura, todo es simplemente perfecto...—dice embelesado Walter.

—Calma, Romeo —dice Iván mientras revuelve con la bombilla el fondo de su guampa, luego de una pausa prosigue— nunca te vi tan interesado en una chica, creo que ella tiene que ser tuya.

—¿Creés que pueda conquistarla?

—Con las armas adecuadas cualquier hombre puede conquistar hasta a la más complicada mujer —levanta una ceja y hace un movimiento con sus dedos insinuando dinero, y continúa — Primero tenés que hablar con ella, encontrar cosas en común y luego invitarle a salir a algún sitio que coincida con sus gustos.

—Ajám.

—Cuidá lo que hacés, lo que decís, lo que pensás, las mujeres tienden a exagerar todo.

Amor fanático (Inédito)Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum