Capítulo 17

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1

Nicasio nunca sale de su casa, desde que salió a la fiesta de inicio de curso y Walter le dio aquel discurso desmotivador perdió las ganas de salir, después de todo, todo lo que había dicho Walter era dolorosamente cierto.

Pasaba los días encerrado en su habitación, entre la computadora y los libros, aunque esta vez dejó de lado los libros por alguien, Iriel.

La había conocido casualmente en facebook, comenzaron escribiendo normalmente, y al notar las cosas que tenían en común fueron haciéndose más íntimos.

Pasaron los días y no había preocupación en la cabeza de Nicasio más que la de llegar del colegio y escribir con Iriel, quien aunque no tenía foto de perfil propia, él la imaginaba bella.

Bueno, ella tenía fotos de personajes animé de perfil, y allá, en el fondo de su perfil una foto suya olvidada de cuando tenía 12 o 13 años. Nicasio amaba esa foto, y se imaginaba cómo estaría ahora con 16, tal vez más flaquita, o más gordita, más morena o con un cuerpo más sensual, de todos modos la imaginaba bella.

Escribían desde las siete de la noche hasta altas horas de la madrugada, a veces amanecía y ellos seguían escribiendo, nunca faltaba un tema de conversación, hablaban desde de libros que habían leído hasta de suplementos vitamínicos. Incluidas noches donde las conversaciones se volvían muy cariñosas y se tornaban románticas.

Desde que Nicasio la conoció pudo desahogarse como nunca, escribirle todo lo que le gustaba sin que lo traten raro, contarle cosas que nunca había contado a nadie, tenía una confianza absoluta en ella, y ella en él. Llevaban así más de un mes y ya planeaban conocerse en persona, ella vivía en San Lorenzo, y él en Capiatá, dos ciudades distintas pero no muy lejanas, de hecho era cerca, al lado nada más, solo ocho kilómetros los separaban, tan sólo era cuestión de coincidir un horario y un día en el que ambos puedan verse libremente.

La vida comenzaba a sonreír a Nicasio.
Siempre le fue mal, se desahogaba de su situación con Iriel, le contaba que su padre falleció, que su madre estaba en otro país, que lo dejaron a cargo de su tía, que aunque no es mala, tampoco es buena, y tiene dos hijos, sus primos, y estos se encargan de hacerle la vida imposible; que se sentía sólo en una familia ajena, que no tiene amigos, que va al colegio sólo y regresa sólo, que antes intentaba hacer amigos y como nunca lo consiguió se cansó, y decidió resignarse a quedarse sólo, leyendo libros prestados de la biblioteca ya que su tía no le compra ni ropa, tiene que conformarse con ropa que cada tanto le manda su madre de España, encerrado en su cuarto con la computadora o el celular, haciendo tarea que es para lo único que es bueno. Nicasio le contaba todo esto a Iriel, le contaba que sentía que estaba a punto de estallar aunque nadie se dé cuenta, que nadie lo quería, y ella le respondía: "Nicasio, yo te quiero".

Las únicas palabras que Nicasio necesitaba para ser feliz y seguir aguantando, saber que aunque esté sumido en una vida de miseria y soledad, ahí afuera hay alguien que lo quiere.

2

Los días siguieron su curso y nada cambiaba, seguían en planes de verse pero no podían, porque ella entraba al colegio en el turno mañana y él en el turno tarde, feriados y fines de semana simplemente ambos no podían, no tienen permiso de salir sino es al colegio.

La vida de Iriel no era súper divertida y positiva tampoco, había pasado por un par de problemas que la llevaron a creer que ningún hombre nunca se interesaría sinceramente en ella, tal vez por su aspecto o por sus gustos inusuales, incluso por su situación misma, ni siquiera puede salir de su casa o recibir visitas ¿Qué clase de novio querría una novia a la que nunca podrá ver? Ni visitar, ni abrazar o besar libremente. Había perdido un par de novios por su paranoia, creía que siempre su padre estaría por ahí, o algún conocido de su padre, tenía miedo constantemente que la vieran y se lo cuenten, que tiene un novio a escondidas, y que la castiguen o incluso pierda cualquier posibilidad de volver a verlo.
Pero con Nicasio era distinto, sentía que él aceptaba su situación, que él la consideraba bella, que sus gustos coincidían y ya no tendría que ocultarlos acomplejada, incluso disfrutarlos y compartirlos con alguien. Ella estaba ansiosa por verlo, y pronto sería el día adecuado.

Amor fanático (Inédito)Where stories live. Discover now