¿Invisible?

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Pov Niall.

Solo nuestras respiraciones agitadas se escuchaban en todo el baño.

Cerré mis ojos y recosté mi frente en el pecho de Shawn, pero solté un jadeo derrepente al sentir el agua caer por mi cuerpo.

Sus manos comenzaron a recorrer mi espalda mientras dejaba un beso en mi cabello.

— ¿Quieres ir a una fiesta conmigo? — pregunto tranquilo.

Frunci mi ceño y levante mi mirada para verlo.

— ¿De quien? — pregunte.

— No es de nadie, iremos a un restaurante bar muy famoso aquí — dijo refiriéndose al lugar en el que estábamos.

— No puedo, sabes que aun soy menor de edad — le recordé y volví a recostarme en su pecho.

Los músculos de Shawn se tensaron.

Y fruncí mi ceño al ver que había palidecido tres tonos más que el suyo.

— ¿Qué ocurre? — pregunte.

Su mirada bajo a mis ojos y sus grandes manos agarraron mis mejillas.

— A-acabó de recordar que... rompí una p-promesa — susurro y junto nuestras frentes — lo siento.

— ¿Por qué? — pregunte confundido.

— Porque había prometido no tocarte hasta que cumplieras los dieciocho — confeso — de hecho, los números que siempre uso son el nueve o el trece para recordar tu cumpleaños.

Yo lo mire sorprendido y sonreí divertido.

¡¡Shawn es un completo caballerooo!!.

— Dices eso después de lo que acabamos de hacer en la tina — comente divertido.

Shawn llevo sus manos a su rostro en frustración y vergüenza.

Esto es tan divertido.

— ¿Te arrepientes? — pregunte.

— Claro que no — respondió con decisión.

Lleve mis manos a las suyas para tratar de quitarlas de su rostro.

— Amor, recuerda que el que comenzó todo esto fui yo. Tanto la primera vez como ahora, yo te estoy dando permiso de que hagas todo esto, así que no te sientas culpable por una promesa que rompiste por mi — dije tranquilo — además, seré mayor de edad en un mes, así que no te preocupes. Hagamos como que ya lo soy — comente divertido.

Él quito sus manos de su rostro y me sonrió.

— El restaurante bar no pide ID.

Sonreí.

Después de hacer un desastre en la tina, nos metimos en la ducha para bañarnos bien, salimos del baño cuando ya estábamos lo suficientemente limpios.

Aun era temprano, por lo que pude dormir un buen rato en la cama.

Me quede dormido estando envuelto en la toalla, porque estaba realmente cansado.

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— ¿De donde sacaste todo esto? — pregunte confundo al ver el montón de bolsas en el sofá.

— Margared lo trajo porque se lo pedí — respondió tranquilo sacando varias prendas de ropa.