Curiosamente, me gustas (Dwight y tú) The Office

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Mar: Bueno, trajimos a este par a la casa y despertarán con una terrible resaca seguramente.

Dwight: Bastante. Perdí la cuenta de cuánto tomaron entre los dos... Heh, se volvieron locos, y todo por mí.

Mar: ¿Por ti?

Dwight: Sí, claro. Celebramos mi discurso, ¿no?

Mar: Eso sí... Y, ¿quieres un café o algo, amor?

Dwight: Sí, por favor.

Le preparé un café y le puse leche y azúcar, tal como le gusta. También me serví uno, pero yo lo tomo sin azúcar. 

Nos sentamos en el comedor y noté que Dwight se veía más radiante que siempre. Como que el discurso y la fiesta lo habían dejado envuelto en un aura superior y satisfecho con la vida.

Mar: ¿Estás bien?

Dwight: Como nunca, ¿por qué?

Mar: No, nada. Sólo quería preguntarte algo.

Dwight: Dime.

Mar: ¿Qué sentiste cuando pasaste a decir tu discurso?

Dwight: Pues al principio me estaba muriendo de los nervios y la ansiedad. Sentí la presión de Michael, tuya y de todas las personas a mi alrededor.

Mar: Yo no te presioné, querido.

Dwight: Bueno, pero quería impresionarte. No quería decepcionarte. Cuando dijeron mi nombre me quedé totalmente paralizado, fue una locura.

Mar: Ay, sí. Mi pobre Dwight *le tomo la mano*

Dwight: Pero, después del intento de Michael por cubrirme, me di cuenta de que era mi deber hacer ese discurso. Era un momento crucial en mi vida, no podría acobardarme. ¿O acaso se acobardaron Frodo y Sam estando a punto de llegar a la cima del Monte Destino? ¿Acaso se rendiría Starbuck ante las calamidades y atrocidades que los Cylon han demostrado hacer?

Me brillaron los ojos sólo de escucharlo tan entusiasmado y valiente <3

Dwight: Entonces subí. Sólo lo hice. El más duro paso es el de empezar, pero lo hice rápido en un ataque de adrenalina, pensando que sería algo momentáneo que, saliera mal o bien, sería tan espontáneo como quitarse un curita de la piel.

Mar: Exacto.

Dwight: Estando arriba, vi las miradas de todos puestas sobre mí. Respiré agitadamente y aclaré mi garganta.

Mar: Sí, a veces se complica hablar sólo por los nervios.

Dwight: Es ese nudo en la garganta, ¿sabes? Pero hice lo que me dijo Jim. En cuanto comencé mis gestos todos me prestaron atención. Sabía que mi discurso era bueno, me dejé llevar por él y lo demás salió solo, ya sin ningún problema. Fue incluso liberador.

Mar: Wow. Es una magnífica anécdota. 

Dwight: Sí... *suspira* De hecho... Bueno no, nada.

Mar: ¿Qué pasa?

Dwight: N-no, es tonto.

Mar: Dime, por favor.

Dwight: Es que... Pensé que es el tipo de anécdota que me gustaría contarle a tus padres cuando me conozcan.

Eso sí que me agarró desprevenida. ¡No puedo creer que piense en conocer a mis padres! Este sí que es un chico que no tiene miedo al compromiso. ¡Lo amo! <3

Aunque quizás deba decirle que mi padre murió... Otro día.

Mar: Aww, qué lindo de tu parte que lo pienses <3