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Me encontraba en una cafetería junto a Seokmin y a este no le paraba la boca, hablaba tan rápido que apenas y podía asimilar lo que decía.


- ¡Dk, basta! —me miró— no te entiendo nada, estás hablando muy rápido.

Me dio una gran sonrisa de oreja a oreja como siempre suele hacerlo. Este niño es un virus de felicidad.

Dk: Lo siento. En resumen, te decía que debemos de ir a la fiesta de Jeonghan, será divertido.

Negué varias veces y ya sabía lo que se aproximaba.

Dk: Anda, ¡vamos! —dijo haciendo un puchero—.

Dk: Vamos, Vamos, vamos, vamos, vamos —dijo jalando mi brazo—.


Me desesperó tanto que le dije que sí.

- ¡AGH! SÍ, PERO YA DÉJAME EN PAZ.

Sonrió victorioso y me encogí de hombros.

- Pero a la primera que algo me arruine la noche te juro que te doy un golpe y me largo inmediatamente.

Dk: Okey, pero no seas tan pesimista
Tn.

Rodé los ojos y se echó a reír.

Dk: Ademas, ¿cuándo la has pasado tan mal? Ehhh.

Abrí los ojos y me senté más recta de lo normal.

- ¿Te recuerdo lo que pasó en la fiesta de Seungkwan? —dije levantando una ceja—

FLASHBACK:

Nos encontrábamos en la mansión de un amigo de Seokmin llamado "Seungkwan" ese chico era agradable, casi igual a Dk, muy ruidoso y agresivo pero no malo, sino que un agresivo sacado de quicio.

Pasaban de las 12:30 cuando él y otro chico se nos acercaron, el otro chico me miraba mucho y llegó un punto en el que me incomodó bastante.


Chico: Así que te llamas tn, ¿verdad?
—asentí—.

Chico: Pues yo soy Leonel, Park Leonel.

Dijo de forma coqueta y extendió su mano, cosa que dejó así durante un tiempo porque jamás la toqué.

Leonel: ¡Wow! así que eres de las difíciles, ehh.

Aquel comentario me molestó, o sea, ¿qué le pasa?

Ni Dk ni Seungkwan se dieron cuenta, ya que estaban en sus cosas.

- Nada de eso —dije fríamente—.

Leonel: ¿O sea que eres una fácil?
—dijo tomándome de la cintura—.

- Y tú eres un idiota.

Lo tomé de la mano y se la torcí, aquel chico se retorció de dolor y comenzó a decir que lo soltara llamando la atención de algunos invitados.

- No soy ninguna fácil ni nada de eso, cuida tu sucia boca, idiota.

Lo solté y este se quejaba del dolor, varios nos miraron mientras  mantenía mi cara de pocos amigos.

Dk volteó a verme y estaba muy sorprendido.

- Te dije que era una pérdida de tiempo venir —dije con un tono más relajado—.

Salí sin bajar la cabeza y varios se abrían para no chocar conmigo.

Dk se disculpó y fue tras de mí.

             FIN DEL FLASHBACK.

Dk: Bueno, es que esa vez me distraje, de no ser así yo te hubiese defendido y nada hubiera pasado.

- Ajá, como quiera sé defenderme yo sola.

Dk se encogió de hombros y después me dejó en casa, nos despedimos y subí en dirección a mi habitación.

- ¿Será buena idea ir? —dije en voz baja—.

Wonwoo: ¿a dónde?

- ¡Ah! Woo me asustaste —dije exaltada y se echó a reír—.

- No da risa, Woo —entrecerré los ojos—.

Eso hizo que  riera más.

- ¡Ya! —reproché—.

Wonwoo: Bien, pues —dijo elevando las manos—.

Solté una ligera risa y Wonwoo se acercó para darme un beso en la frente.

Wonwoo: Sabes que te amo niña.

- Y yo a ti Wonwoo.

Después de eso cada quien se fue a su habitación.

Estaba sentada en el balcón, hay veces en las que tengo recuerdos de él, ya sea dormida o despierta, son ligeros recuerdos que me hacen sentir bien pero a la vez triste.

El aire recorría todo mi cuerpo, la luna iluminaba todo, el sonido de la noche era magnífica, cerré mis ojos y mi mente se desvió en un recuerdo de cuando era más pequeña.


FLASHBACK:

Era el día en que los padres asistían a la escuela y pasaban un agradable día con sus pequeños niños pero los míos no llegaban y sólo me encontraba sentada viendo como todos disfrutaban, mi mirada siempre se posaba en aquella puerta color blanca esperando con ansias a que ellos llegaran. Sin embargo, ya habían pasado casi 30 minutos y ellos no aparecían, en ese momento me sentí la niña más triste y solitaria, había perdido la esperanza de que mis padres entraran por esa gran puerta color blanca.

El hecho de que no llegaran me hacía sentir mal, veía a mis compañeros disfrutando y nadie se percataba de aquel dolor de una niña de tan sólo siete años estaba experimentando.

Pero después vi como una mano se extendió hacia mi haciéndome voltear hacia esa persona, mi cara cambió por completo y mis ojitos luchaban para que lágrimas no derramaran.

Aquella persona me extendió su mano para después darme un abrazo y un beso en mi cabeza, él había llegado a salvar mi día, fue como un héroe para mí.

Durante el día jugamos y nos divertidos mucho, todo lo demás se fue esfumando lentamente y ya no había rastro de aquella niña triste.

             FIN DEL FLASHBACK.

Sentí caer una lágrima, tenía una sonrisa en mi rostro y mi cuerpo estaba rígido. Di un largo suspiro para después pararme e irme a dormir.

El recodar a esa persona me pone muy feliz pero cada que la recuerdo hay lágrimas de por medio, hace tiempo que se marchó pero aún hay recuerdos y ansias de volver a verlo.

Antes de irme a dormir me lavé la cara y los dientes, me puse una pijama y me fui a la cama cayendo en un profundo y relajado sueño.

LOVE IS THE TRUTH / Kim Mingyu.Where stories live. Discover now