El juego del destino #2

Capitulo 31

Holaaa, Este es el penúltimo capitulillooooooo

Disfrutenlooooo

Espero les guste

Recuerden votar, comentar y compartir. Me ayudarían muchísimo.

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Hollydence

—Klaus... —insisto por décima vez— Sabes que será lo mejor para ti amor.

—Lo sé, pero estar allí y hablar sobre lo sucedido —se calla— Será difícil pero creo que será lo mejor.

Sonrio, pero una sonrisa sincera que hace un tiempo no había formado en mis labios.

—Holly, amo a nuestro hijo y quiero lo mejor para él como también sé que lo quieres tú —comienza y asiento estando de acuerdo— Creo que en estos momentos lo mejor será que...

El tono de llamada de mi celular nos interrumpe y me levanto a verlo decidiendo ignorar la llamada que ahora se es de Matt.

—¿Quién era? —pregunta con el ceño fruncido.

—Desconocido —respondo automáticamente.

En realidad si dice número desconocido.

Vuelvo a tomar asiento en el sofá y me acaricia la mejilla.

—Creo que...

La llamada en mi teléfono vuelve a interrumpir y decido cortar esto de raíz de una vez por todas.

—Esperame un segundo, ya regreso —le digo tomando el móvil y subiendo al segundo piso.

Contesto la llamada y la voz desesperada de Matt entra en el parlante.

—Holly porfavor no cortes, —habla rapido— Me enteré lo de tu suegra, si quieres justicia entonces ven a verme hoy a la clínica a las tres.

No me da oportunidad de responder cuando ya ha colgado la llamada.

Bajo rápidamente las escaleras y veo que Klaus está con el portátil de cárter en el regazo.

—¿Lo fuiste a buscar antes o después de golpear a Cárter? —le pregunto con inocencia.

Lo siento tragar grueso y sacudo la cabeza.

—Sabes que es peligroso y sin embargo vas y lo golpeas cómo si tú vida dependiera de ello —exclamo enojada— Se que es el culpable de todo... Lo se klaus, pero aunque sea tu padre no puedo confiar en que no te hará daño. Ya no eres solo tu, ahora somos nosotros, los tres... Recuérdalo.

Se pasa las manos por el rostro y luego por el cabello.

—Sé que estuvo mal, pero no tenía otra opción, quizá debí haber ido con más gente, asegurarme de que no hubiera peligro, pero Liebe ya volví y estoy bien —se levanta encerrando me entre sus brazos.— Lo prometo amor.

Suspiro ye dejo caer en su pecho.

—¿Que encontraste en la laptop? —pregunto despacio.

—Aun no encuentro lo que busco, tengo la sensación de que las aplicaciones tienen portadas falsas para desviar la atención de la verdadera carpeta que debe estar asegurada.

—Ya veo...

Nos miramos y luego de darnos un pequeño beso comenzamos a investigar en las distintas secciones de la computadora, Aiden se aburre de jugar con el conejo de la tía Claire y se viene a recostar en mi regazo con klaus haciendo cariño en el cabello, por ende debe buscar con una sola mano pero no veo que le moleste.