En busca de la felicidad [TERMINADA]

Capítulo 41

EZRA SMITH

Leah no me ha mandado ni un solo mensaje, ni siquiera me ha llamado, eso me tiene bastante intranquilo, debí haber ido con ella y quizá permanecer cerca mientras leía su carta pero no, yo y mis estupideces, sé que si no fuera por ellas no sería yo pero eso no significa que siempre esté contento con esto, me arrepiento, le mandé ya varios mensajes pero ninguno ha tenido respuesta es más, ni se ha conectado.

Bueno ya, debo darle su espacio.

Miré de nuevo mi teléfono, son las 2:10 a.m. y no he obtenido nada, ni una sola señal y lo que es peor es que mi mente está al tanto de todo esto, teniéndome en alerta, es decir que me tiene despierto por la tensión de no saber absolutamente nada sobre Leah, hasta se me vino a la mente ir a verla pero estoy seguro que su mamá me hubiese botado de ahí, eran las 12:00 a.m. cuando se me ocurrió esa idea y tuve que resistirme a ella, lo que menos quiero es causarle problemas pero esta espera me mata.

Ok, creo que estoy exagerando.

En eso mi teléfono empezó a vibrar, atendí al instante en tiempo récord.

— ¿Leah? — Dije rápidamente — ¿Estás bien?.

— ¿Así que esa es la razón por la que sigues despierto? — La risa de mi mejor amigo Aidan resonó fuertemente. Rodé los ojos — Verte enamorado es algo nuevo Ezra, me sorprendes.

— ¿Qué puedo decir?, soy una caja llena de sorpresas — Suspiré de manera pesada, mi preocupación sigue aquí conmigo — ¿Y tú qué haces despierto a esta hora?.

— Acompañé a los demás a una fiesta, no me gustó y me vine al patio a relajarme, luego te vi en línea y decidí ver que te pasaba pero no fue necesario preguntarte — Soltó una carcajada algo apagada — El amor hace cosas maravillosas.

— ¿Estás bien?.

— Nada se te escapa — Murmura en medio de un suspiro — Lina está aquí.

Oh no.

— ¿Les dijiste a los demás?...

— No quería aguarles la fiesta, se están divirtiendo mucho.

— Bro, creo que lo mejor es que no vuelvas adentro, y si ella viene a ti solo aléjate.

— Lo haré Ez, me quiero demasiado como para caer de nuevo — Esas palabras me aliviaron, no tanto por lo que dijo, si no por la seguridad que tienen — ¿Le pasó algo a tu chica?, cuando me atendiste parecías preocupado.

— Algo así... — Hice una pausa — Debió haberme mandado un mensaje o llamada para decirme que todo está bien, pero ya es de madrugada y no lo ha hecho.

— Respira tranquilo bro, ella seguro está bien, también necesita su momento para pensar.

— Lo sé, pero eso no me quita esta preocupación, le doy su espacio pero aquí entre dos esto me está matando — Me eché en mi cama, mirando el techo — No quiero que sienta que está sola, eso me da miedo en parte.