...PAIN... (Andy Strucker)

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟓

𝕰𝖑 𝖆𝖒𝖔𝖗 𝖆 𝖛𝖊𝖈𝖊𝖘 𝖓𝖔 𝖇𝖆𝖘𝖙𝖆

Tomense el tiempo de escuchar la canción, es una joya

Andy ha estado extraño, casi no habla, no come y no se quiere despegar de mi, según él, es para protegerme, pero eso no lo deja usar sus poderes al 100% y me da miedo que Reeva lo note.

Me encuentro sola en mi cuarto, Andy está con Lorna o al menos eso es lo que me dijo que haría.

De pronto, siento la puerta de mi cuarto abrirse y por ella entra Reeva.

—¿Cómo te encuentras, Lilith?—habla ella y yo me levanto de la cama.

—Estoy bien, han Sido días difíciles para mí pero lo superaré...

—Respecto a eso... Sé que algo sucede con Andy, tu misma has visto el entrenamiento, pero él no quiere decirme nada, esperaba...

—Que yo te lo dijera.

—Bueno, se que son novios, él habla contigo y si hay alguna posibilidad de ayudarlo, me gustaría hacerlo.

—Andy... Él está teniendo pesadillas.—quiza no debería, tal vez esté cometiendo un error, pero no quiero que por mis sueños y mi pasado, Reeva tenga que matarlo, sé cómo funcionan estos grupos de mutantes, se que si no haces lo que te piden y para lo que te trajeron, te asesinaran.

—¿Pesadillas?, Todos tenemos pesadillas Lilith, esto es algo más.

—Es que no son simples pesadillas Reeva, son mias.—ella me ve confundida—Como sabes, Andy y yo estamos unidos, hemos fusionado nuestros poderes, pero también nuestras almas y él... Parece poder meterse a mis sueños.

—Pero, ¿qué tiene que ver eso con que no pueda usar sus poderes?

—Que yo solo tengo pesadillas, sueños con mi pasado, un horrible pasado que no le desearía a nadie, el punto es, que no puede soportarlo, él está colapsando, quiere ayudarme y no sabe cómo, esas visiones lo están volviendo loco.

—Entiendo...  Pues creo que la solución es clara, esto no pasaba cuando ambos estaban separados, ¿verdad?—niego—Lilith, debes alejarte de él.

—¿Qué?, Pero es mi alma roja, el es... Mi novio, ¿cómo puedo alejarme de él así como así?—comienzo a alterarme, no me gusta la solución, no quiero.

—Lo se cariño, se lo importante que es para ti, pero es la única forma de que ambos se salven sin que tenga que eliminarlos... No puedo dejarlos ir y lo sabes.

—Lo sé, pero... Es que no quiero dejarlo ir...

—Si quieres, las chicas pueden ayudarlos a olvidar...

—¡NO!, ni se les ocurra meterse en su cabeza Reeva o no me importarán los planes que tengamos—Mi postura cambia, pasa de una relajada a una de amenaza, no puedo permitirlo.

—Tranquila, entiendo que no deseas olvidarlo, pero bueno, ya sabes que hacer linda, espero puedas complirlo, te asignaremos otro cuarto, mantente lejos de Andy.

Y dicho eso, se marcha por dónde vino, dejando a mitad del cuarto, con lágrimas en los ojos y ganas de matar a alguien.

Pero... Ella tiene razón, Andy corre peligro si sigue teniendo mis sueños, así que la única manera de mantenerlo a salvo es alejarlo, incluso si hay separar nuestras almas, haré lo necesario para que él esté bien.

(...)

Luego del almuerzo, me encuentro a Andy sentado en el borde de la cama, es momento de decirle...

Retengo las lágrimas que quieren salir por lo que estoy por hacer y me siento a su lado.

—Andy... Hay algo de lo que te tengo que hablar.

El voltea a verme sorprendido por mi repentina seriedad, se acomoda mirándome.

—Claro amor, dime, si es porque estoy demasiado callado últimamente es que ya sabes... Es doloroso.

—No es eso... Yo...

—¿Te sientes mal?, Puedo decirle a Reeva o a las Frost que vengan, puedo—lo interrumpo.

—No Andy, es sobre tú y yo.

Su rostro se contrae y él retrocede y espera paciente a qué le cuente.

—Yo... Necesito espacio, necesito un tiempo Andy, esto...—las palabras se me traban en la garganta, no quiero decirlo, él me observa con los ojos aguandose lentamente.—no está funcionando.

—Pero Lils, amor, no entiendo, estábamos bien hace rato, pensé que...—el cubre su cara y frota la misma con sus manos.—¿Por qué estás haciendo esto?

Por favor no me veas así... No llores por favor o no podré hacerlo.
Me ve como si estuviera tan triste... Cómo si acabara de romper su corazón en mil pedazos y me detesto.

—Lo siento Andy... Te quiero muchísimo, lo sabes, eres mi alma roja, pero quiero que te mantengas lejos, por el bien de todos.

—¡¿De qué hablas?!—se altera de la nada, se ha parado de su asiento y ahora llora de ira, reconozco esa mirada, no puede creer lo que estoy diciendo.—¡¡¿Porque mierda separarnos sería por el bien de todos?!!

—Andy, cálmate—intento acercarme pero sus poderes me alejan violentamente y mi cuerpo impacta contra una pared—ay...

Andy parece darse cuenta de lo que acaba de hacer y se acerca rápidamente a ver si me encuentro bien, pero noto como su nariz comienza a sangrar y un dolor choca con su pecho.

—Perdoname, no se que hice, yo... No quise hacerte daño, lo lamento—el me ayuda a levantarme y yo simplemente quiero salir de aquí.

—Esta bien, pero en verdad necesito que lo aceptes, en la noche me iré al cuarto que está vacío, así que volveré en un rato para sacar mis cosas...

—Amor, no sé que fue lo que hice mal pero en verdad quiero arreglarlo, no hagas esto bonita...

—No puedes arreglar algo que nació estando roto Andy...—y con lágrimas rodando por mis mejillas, salgo del cuarto ignorando el dolor que estoy sintiendo ahora y no es porque seamos almas rojas, si no porque lo amo tanto como para alejarme de él por verlo bien.

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No me maten, es para el bien de la tramaaaa