The Other Woman

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Warning: Infidelidad, matrimonio organizado, implicación de actos delicados, amenazas, etc.

Jazier se levantó de repente. Estaba lleno en sudor, su cabello mojado y el cuarto estaba caliente además de una erección en su entrepierna.

Toco su frente mientras calmaba su respiración —Todo fue un sueño — se repetía a si mismo mientras se recostaba y volvía a dormir

El protagonista de su desespero era un sueño. Dioses, te había faltado al respeto con esos pensamientos tan canallas. Nunca había tenido problemas con no tener intimidad contigo.

De pronto el sueño donde te tomaba y hacía suyo recurría su mente. Todo era borroso pero claramente recordaba el placer que sentía y la cara de placer planteada en tu rostro....

Jazier se encontraba murmurando en su sueño. El sudor en su frente y el calor del cuarto lo iban a volver loco —(T/N)... — un murmullo casi inaudible...

Todos se encontraban desayunando. Jazier se veía más pensativo de lo normal. Posaste tú mano sobre la suya levemente para llamar su atención —¿Está bien, Rey Jazier? — Jazier se exaltó al ser sacado de sus pensamientos repentinamente.

—Estoy muy bien, esposa ¿Cómo amaneciste hoy? — preguntó mientras comía —Muy bien — fue lo único que respondiste.

Jazier no tenía el valor de verte a la cara. Había derrotado a muchos de sus enemigos y ahora no era lo suficientemente valiente cómo para ver a su esposa a la cara.

Te había deshonrado con su menté. Todos esos pensamientos lascivos sobre ti. Nunca había soñado nada de eso con Grizel ni con ninguna mujer. Y ahora tú eras la protagonista de uno de sus sueño más eróticos.

Tú pequeño toque se sentía tan bien. Nunca te había molestado no tocarte sexualmente pero ese sueño había encendido algo en el haciendo que cualquier toque tuyo se sintiera bien.

—(T/N)... — llamó tú nombre cómo si lo estuviera saboreando —¿Te gustaría ir conmigo al festival de las flores? — ofreció lo cuál te llamó la atención.

—¿Hay alguna razón para invitarme a mi en particular? — preguntaste mientras ojeabas a tus suegros los cuales estaban igual de perplejos que tú.

—Alissa me dijo que te gustaban mucho las flores además el Norte no es muy famoso por su clima ideal para las flores así que es una ocasión especial — explicó con su actitud habitual.

—Eso me gustaría mucho, Rey Jazier — dijiste —Muy bien, te recogeré en tú recámara al mediodía — dijo mientras asentías y Gaitlyn te veía con una sonrisa.

Era casi mediodía cuando Jazier tocó la puerta de tu recámara —¿Puedo entrar, esposa? — preguntó mientras giraba la manija y se abrió pasó por el cuarto.

—¡Ya casi estoy lista, Rey Jazier! — avisaste mientras salías de tú baño y revelabas tú ropas.

Vestías un hermoso vestido blanco con estampados de flores en el. Tú cabello suelto.

Jazier se quedó perplejo cuándo vió tú ropa. Ese era el vestido de sus sueños. Esa era la vestimenta que portabas en su sueño.

—¿Hay algo mal en mi vestimenta? — preguntaste mientras observabas tu vestido —No hay nada mal con su vestimenta, esposa. De hecho, se ve hermosa — Jazier se aclaró la garganta.

—Podemos irnos — dijo mientras abría la puerta para ti y ambos salían.

Es una de mis primeras veces escribiendo smut, no es realmente mi campo de escritura pero hice mi mejor esfuerzo, mis disculpas si es malo.

¡Gente, es oficial! ¡Nuestro Rey esta enamorado!