The Other Woman

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Warning: Infidelidad, matrimonio organizado, actos delicados, amenazas grave, machismo, diálogos cuestionables, violencia, muerte, desnudez etc.

Han pasado 3 meses. Las chicas han sido muy buenas contigo. Has pensado en la propuesta de Lyannah y has llegado a una conclusión.

—No puedo aceptarlo. Tengo una oportunidad de vida en el Sur pero tengo esté sentimiento. Siento que hay algo que no me deja salir adelante — dijiste y Lyannah asintió tristemente.

—Gracias por tu ayuda. Nunca podré pagarte por tú ayuda pero te recompensaré grandemente — dijiste sosteniendo sus manos y ella negó tristemente —(T/N)... nosotros nos vamos. No nos volveremos a ver nunca más. Mi aquelarre se irá a otra lugar y nadie nunca sabrá. — dijo y la sonrisa se borró de tú rostro.

—Te puedo ayudar a buscar eso que no te deja seguir adelante — dijo Lyannah —Muchísimas gracias — la abrazaste.

Ambas se sentaron en el  suelo —Busca eso que te duele hasta en el alma, eso que dolerá por 1000 años... — decía Lyannah mientras cerraba los ojos.

En tus memoria yacía un recuerdo que te atormentaba...

—¿Querido esposo... le gustaría consumar nuestro matrimonio? — dijo una (T/N) de 21 años semanas después de su boda.

—¡¿Porqué siempre tienes la necesidad de decir tantas tonterías?! — dijo Jazier molesto poniéndose frente a ti y en un acto de estupidez quisiste darle un beso pero fuiste empujada levemente.

—¡¿Qué demonios crees que haces?! — gritó Jazier lo cuál te asustó —Mis disculpas, esposo. Creí que un pequeño beso encendería alguna llama entre nosotros— dijiste avergonzada —No hay ninguna "llama" entre nosotros — dijo Jazier.

—Te lo probaré — dijo Jazier mientras unos guardias entraban al cuarto y tomaban tus brazos fuertemente. Detrás de ellos entraba Grizel.

Había muchos indicios que tú esposo te estaba engañando pero no los quisiste creer ¿El hombre que admirabas no podía hacerte eso o si?

Tú corazón se rompió. Ambos se unieron en un beso apasionado frente a ti —¡¿Cómo me puedes hacer esto?! ¡Yo no hice nada para merecer esto! — forcejabas para salir del agarré de los guardias pero era imposible.

—Te amo Grizel... — esas palabras fueron como flechas atravesando tú corazón —¡Déjame ir, te un poco de compasión! — rogabas con lágrimas en los ojos —Dijiste que querías consumar nuestra matrimonio ¿No? — dijo Jazier y tú estómago dió un vuelvo.

—Está es tú ceremonia de lecho. Tú serás nuestro testigo — dijo Grizel con una sonrisa.

Las horas pasaban, no podías salir del cuarto. Los gemidos de ambos amantes era un dolor para tú corazón. Grizel dormía en tú lado de la cama. Está yacía inconsciente debido al cansancio. Jazier se levantó y camino hacía ti.

Caíste en tus rodillas hace ya un rato y las lágrimas no dejaban de rodar y tus ojos estaban hinchados. La figura desnuda de Jazier apareció frente a ti.

Te hizo verle a los ojos y una sonrisa malvada apareció en su rostro —Eres muy linda cuándo lloras — dijo mientras limpiaba las lágrimas de tus ojos y se acostaba a dormir con Grizel de nuevo. A petición de Grizel se te hizo dormir en el suelo.

Caíste al suelo de nuevo. —¡¿Estás bien?! — preguntó Lyannah al ver tú rostro lleno de lágrimas —Ya se que debo hacer — dijiste decidida.

—Debo ir a Muikhandu. Debo hacer pagar a Jazier — dijiste —Lo que te haga feliz (T/N). Eso es lo que debes hacer — dijo Lyannah.

Ahora estabas a punto de irte cuando ella te detuvo abruptamente. —Si yo hubiera sido un hombre no habría sido un pecado amarte. En otra vida... me hubiera encantado ser una bruja junto a ti y explorar lugares desconocidos — dijo con una lágrima rodando y te abrazó.

—Perdóname — dijiste mientras correspondías su abrazo...