Nothing to lose [Aemond Targaryen]

-Detrás de mi

Advertencia: mención breve de violencia infantil, sangre y mutilación.

Aemma Targaryen

La tenue luz que se emitía desde el interior del lugar, me hizo darme cuenta debido a las sombras que no estábamos solos.

Tome con aún más fuerza la mano de Aemond y antes de entrar vacilamos un poco, y decidimos dar una segunda vuelta antes de entrar.

-¿Sabías que las Velaryon están aquí? - Cuestiono Aemond.

-Si, lo se, fue el funeral de su madre obviamente iban a estar aquí- Espeté

-No te escuchas feliz-

-Sabes que ellas no son Velaryon, fuera de las conversaciones de nuestros padres, por mi propia cuenta me he dado cuenta de eso-

-¿Cuál es tu teoría?- Preguntó Aemond.

-No creas mucho en lo que digo, pero yo digo que son hijas de amm..-

Dudaba mucho en pronunciarlo, la legitimidad no era un tema fácil de digerir, y lo mío solo eran meras especulaciones.

Y solo tenía un buen punto y era el de Gelinyra, por sus características físicas pero de ahí en más no tenía nada más.

-Vamos dímelo, no se lo diré a nadie, además yo también tengo mis sospechas- Pronunció

-Bueno, te lo diré pero vas a cerrar la boca- Espeté

El alzó su mano y figuro un cierre en su boca, dándome a entender que se iba a callar.

-Creo que es de Jason Lannister, sus características, además de la sospechosa cercanía que tenían Laena y el, y ya sabes siempre permanecía mucho aquí en el palacio a pesar de tener todo marcaderiva, y la razón que creo que lo hacían era porque si lo hacían en ese lugar o en la morada de los Lannister iban a levantar algunas sospechas, y en el palacio no lo harían, o al menos no en mayor medida, y así lo ocultarian un poco, lo único que me apena del asunto es el pequeño Jofrey, lamento que perdiera a su mamá tan pequeño- Concluí

- Si yo también pensaba algo así, lamento lo de Jofrey-

-Si pobre, cada vez que lo veo lo único que puedo ver a través de sus ojos es a mis hermanitos-

Sin antes poder acabar la conversación estábamos nuevamente ante la puerta del pasillo.

Entramos y estaba arenoso debido que era una entrada directa desde el exterior hasta el interior, comenzaba a caminar con algo de dificultad porque el vestido se lleno de arena y lo mismo con las zapatillas.

-Te vez graciosa llena de arena- Dijo Aemond riendo.

-Ayúdame inepto- Dije yo también para echarme a reír.

Pero nuestras risas fueron opacadas por tres mujercitas con una cara de pocos amigos.

No comprendía lo que pasaba pero la mirada de furia y complicidad entre ellas me decía que no era nada bueno.

Aemond instintivamente me coloco detrás de él para evitar un posible altercado entre Gelinyra y yo, por la razón que fuera.

-¡¡Es el!!- Pronunció Baela apuntando a Aemond furiosa.