6. Es por él

8K 465 35
                                    

Gabriela

Hice una maleta pequeña con las cosas que necesitaría para arreglarme. Era obvio que no me quedaría en el apartamento con ese ruido horrible y mi ex a lado.

Hoy tenía que acompañar a Gregor a la cena con Vasseur, pero antes debía ir a recoger a Olive a su clase de ballet y llevarla a casa de su abuela a las afueras de Roma para que pasara la noche allí.

Llegue al apartamento de Gregor al mediodía. Todo estaba limpio e impecable como siempre, entre a mi habitación designada cuando me quedaba aquí y empecé a buscar en el armario algunos vestidos de gala que había dejado. Encontré uno negro con escote de corazón, uno rojo con encaje y uno blanco con un moño negro.

¿Cuál me pongo?

Entre en una crisis sin saber cuál debería usar, hasta que decidí que yo sola no me decidiría así que llame a Fred.

*Fred*

—Hola—contestó luego de tres tonos algo agitado.

—Necesito tu ayuda. — rogué.

—Espera— él salió a lo que parece su terraza.

"papá regresa" el grito de London no se hizo esperar.

—gracias por salvarme— susurró y yo reí— estaban a punto de cortarme de nuevo el cabello ¿sabes cuánto tiempo me tardo en crecer desde la última vez?

—Son solo niñas.

—Yo las llamaría demonios rencarnados, parece que nunca se les acaba la pila.

Eso solo hizo que riera más fuerte.

Pobre Fred siempre que le toca lidiar con esos pequeños tornados algo termina saliendo mal.

—¿Y tú como vas con Olive?

—Es un amor— él suelta un suspiro de cansancio.

—Salió a su padre.

Asentí con una sonrisa.

—Sí, lo hizo.

—Y dime ¿cómo vas con él innombrable?

—Se mudo al departamento de alado, ahora somos vecinos— solté con un tono lastimoso e irritado.

—bueno, siempre puedes quedarte con Gregor.

—Lo sé, es solo que me irrita verlo en todas partes, es como si ahora que estoy lista para cerrar ciclos el universo se negara a que lo haga.

—Nena, debes urgentemente buscarte a otro clavo.

—¿qué? — fruncí el ceño.

—Si, ya sabes un clavo saca a otro clavo.

—Eso no funcionó muy bien que digamos para ti.

—Son historias diferentes—me aclaro con una sonrisa. — además tienes a un hombre guapísimo con un trabajo de ensueño y la vida perfecta que esta más que dispuesto a formalizar las cosas contigo.

—Gregor y yo solo...

—No digas que solo son amigos— me corto— te recuerdo de esa vez hace años cuando...

—Basta— esta vez yo le corte— no significo nada para ambos.

—Si que lo hizo— me corrigió. — y estoy seguro de que muere por repetir y darle hermanos a Olive.

Enseguida me sonroje y mire a todos lados buscando que el equipo de limpieza de Gregor no este escuchando la conversación.

—Fred

Casada con el CEO ©Where stories live. Discover now