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De alguna manera SeokJin había convencido a la japonesa de ir a su hogar, Namjoon estaba cuidando a Jinnie en el hospital, esta miraba asombrada el nuevo hogar de su ex pareja. Este era grande y sus paredes eran blancas con detalles dorados, mantenía tanto la esencia de SeokJin.

— El baño esta al fondo a la izquierda

— Gracias SeokJin 

Cuándo el agua empezó a caer sobre su cuerpo fue como si le quitarán un poco de todo el peso que tenía sobre sus hombros, el baño de SeokJin mantenía pocas cosas para el cuidado del cabello pero abundaba si se trataba de el cuidado del rostro, el shampoo tenía un olor a menta y pudo reconocer que era la misma marca que él usaba hace años.

— Satou, dejaré un poco de ropa limpia — Amaya pudo notar la mano de SeokJin dejar algo en el lavamanos— Estoy cocinando así que después de cambiarte ve a la cocina para comer 

— Gracias Seok 

Amaya terminó de bañarse, al vestirse notó que era la ropa que ella tenía en el bolso que había llevado a excepción de la camisa, era una camisa blanca unas tres tallas más grande que la de ella.

— Este SeokJin... — murmuró antes de ponerse la camisa, con una toalla más pequeña empezó a secarse el cabello y salió del baño evitando mirarse al espejo— SeokJin, ¿qué le sucedió a mi camisa?

— Es blanca, no la pude lavar con la demás porque era de color — Amaya se acercó a la cocina para ver que era lo que el hombre cocinaba— Prueba esto Satou — La japonesa comió de la cuchara que le ofreció SeokJin.

— Le falta sal — SeokJin volvió a sazonar la sopa— Huele bien 

— Obvio — Jin rió después de decir aquello— Ve a sentarte — dijo antes de empezar a servir la comida en un plato— Espero que tus gustos en la comida no hayan cambiado tanto Satou 

— No he cambiado mucho — Amaya empezó a comer y sus ojos se iluminaron al primer bocado.

SeokJin no pudo evitar sonreír al mirarla, él no podía comprenderse totalmente en ese momento pero se sentía a gusto en ese momento. Su mente aún estaba confusa por todo lo que estaba sucediendo, no sabía como tenia que reaccionar o que debía hacer.

— ¡Mierda! — SeokJin reacciono al escuchar la grosería en japonés, observó como la camisa de Amaya estaba manchada y le extendió una servilleta aunque sabía que eso no serviría de nuevo— Lo siento... 

— No te preocupes, quitate esa camisa iré por otra — SeokJin caminó hasta su habitación para tomar cualquier camisa que él usaba como pijama, cuando volvió notó como la chica seguía viendo la mancha en la camisa— Deja de ver eso, no la quitarás de esa manera

— Lo sé — SeokJin se puso frente a ella, la diferencia de alturas seguían siendo notable — ¿Seok? 

— Lo siento... sigo un poco distraído, ponte esta camisa — La mirada de Jin bajo hasta los labios de Amaya quien había levantado un poco su rostro para mirarlo— Yo... — Jin paso la lengua por sus labios al sentirlos resecos.

— ¿Tú? — Amaya tomó la camisa gris— Iré a cambiarme al baño

Amaya se alejó de él pero SeokJin la tomo de la muñeca, el silenció no era incómodo en ese momento y los latidos de sus corazones se aceleraron por un momento. Con cuidado la acercó hasta él, junto sus labios con cuidado mientras una de sus manos se posaba en la cintura de ella.

Ambos sabían que estaba mal pero ninguno quería detenerse. Ambos sabían que si no rompían aquel beso iban a salir más lastimados de lo que estaban pero aun teniendo eso en mente decidieron dejar todo de lado.

— Esto no significa que nos hemos arreglado, sigo molesta contigo — Amaya terminó de ponerse la camisa y se levanto de la cama— Procuremos que esta sea la última vez que nos veamos, hablo en serio Seok

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— Esto no significa que nos hemos arreglado, sigo molesta contigo — Amaya terminó de ponerse la camisa y se levanto de la cama— Procuremos que esta sea la última vez que nos veamos, hablo en serio Seok

— Yo si quiero seguir viéndote, también quiero ver a EunJi, quiero ser parte de su vida — Jin se puso un pantalón de chandal antes de levantarse de la cama— Por favor, no me sigas intentando alejar 

— Volveré a Busan cuando le den el alta a EunJi — Satou mordió la parte interior de su mejilla— SeokJin, los dos sabemos que esto no puede funcionar... 

— No te encierres en ese pensamiento, podemos hacerlo funcionar. Pueden mudarse a Seúl, puedo conseguirte un apartamento para ti y Jinnie, podemos empezar a salir de nuevo

— SeokJin, esto no es un drama, tenemos como cuatro días de habernos encontrado y tu ya estás planeando una vida, ¿en serio crees que esto puedo funcionar? ¿en verdad crees que dejaré mi vida para venir a algo inseguro contigo? EunJi cometió un error al venirte a buscar y fue mi culpa por no estar más pendiente de ella

— Amaya... — murmuró, en ese momento un recuerdo volvió a la mente de SeokJin, unas palabras que no quería recordar.

<<Sí algún día mueres... estoy segura que moriría contigo>>

— SeokJin por favor... —  Los ojos de la japonesa se cristalizaron en ese momento—  sabes que no lo haré, no me puedo mudar a Seúl 

— ¿No existe ni una oportunidad de hacerte cambiar de opinión? —  SeokJin tomo la mano de Amaya esperando que esta la soltará o la apartará pero la chica solo la tomo con más fuerza.

—  Lo siento también me disculpo por haber ocultado a Jinnie, se que tu querías ser padre y te quite esa oportunidad pero no creo que podamos estar juntos... lo mejor es que cada uno vaya por su camino y vivamos como lo estábamos haciendo hasta ahora.

SeokJin no pudo dar una respuesta, para él la chica siempre fue como una estrella.  

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