Una historia real , realmente imaginaria [+18]
Es una historia Sex/Vainilla al inicio ojo solamente al inicio muy descriptiva
Dos chicos que se conocen desde pequeños, se enamoran pasan por mucho juntos un intento de suicidio, secuestro , tortura...
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PARTE FINAL
Profesor Taylor +21
Arianna.
Máximo estaciona en un terreno baldío, me saca a rastras por el cabello, de la camioneta y me mete en el terreno, la arrastrada me llena de barro.
- Muy bien zorra, ahora te amarrare y gozaré, luego te soltaré.
- Canalla.
- Perra.
- ¿Por qué tú obsesión conmigo?
- No te creas importante, ni divina.
- ¿Entonces algún motivo debes tener?
No dice nada más bien, me amarra del árbol, siento la soga, es liga la puedo romper, con algo de fuerza, se me acerca y rompe mi camisa, me mira.
- No usas relleno pensé que sí, son grandes, me divertiré.
- Aléjate desgraciado.
Me cachetea, y rompe la licra, sus manos intentan recorrerme pero no lo permito, lo pateó.
- Zorra maldita.
Me da una patada con la punta del pie en la entrepierna, este se introduce tan a fondo que me deja sin aire y sangrando, la sangre escurre por mis piernas me duele, solo puedo llorar, rompe la tira elástica del sostén y con ella me da en la cara, saca un cuchillo.
- ¿Dónde te lo clavo? Aquí- hace el intento de apuñalarme el pecho- no, sería matarte rápido, mejor aquí- clava el cuchillo a dos dedos de la rodilla- así no podrás correr ni seguir bailando ballet, que papi se despida de la inservible de su hija.
- Si- ahogada en dolor le digo- pero no me dejara aquí.
- ¿Qué dices perra?
- Lo que escuchas me enviara con mi hermano y le contaré todo y ahí si escóndete por qué él te matara, Andrés no se dará por vencido si algo me pasa, por menos de esto mato a un acosador- miento- y se lo dio de comer a sus padres- él se asusta- cuidado.
- Cállate perra – me cachetea- entonces te violo, pido rescate y cuando lo tenga te mato y listo, querías motivos pues ahí lo tienes, quiero tu maldito dinero, me fijé en tu cartera no en ti y como me la pusiste difícil, está opción es la ideal.
Me callo, estoy presa del miedo, no se de lo que sea capaz y el seguir diciendo esto me puede costar caro, el comienza a manosearme, yo solo grito, no deja de pegarme, pierdo la cuenta a la décima cachetada, me sangran las mejillas, Rapha ojalá ya te hayas dado cuenta que no estoy, de repente escucho un ladrido todo escandaloso, con la poca fuerza que tengo susurro.
