El obsesivo shou sigue adelante

Extra 7: Quiero casarme contigo

Después de eso, Yun Qingci comenzó a buscar a Li Ying en el palacio con la ficha pequeña.

A Li Hong le gustaba Li Ying, por lo que a menudo le "enseñaba personalmente" y lo guiaba a artículos de crítica. Cuando Yun Qingci fue allí por primera vez, Li Ying estaba haciendo su tarea en el Salón Jiangshan, y cuando escuchó a las personas a su alrededor decirle que Yun Qingci vendría, les dijo: "Déjenlo esperar un rato".

Li Hong estaba muy sorprendido: "¿Xiao Ci vino a buscarte?"

"Sí", dijo Li Ying, "Lloró anteayer y se quejó de que nunca lo buscó. Para hacerlo feliz, le di la ficha".

Li Hong se rió y dijo con emoción: "Está bien, después de ese incidente, Yun Yu ha estado muy preocupado por él, con usted protegiéndolo, puede sentirse aliviado".

Le ordenó a Yun Qingci que fuera al palacio Jiangshan para acompañar a Li Ying a estudiar sin tener que esperar en el palacio, y dijo que, si no tomaba la señal en el futuro, no tenía que detenerlo.

Después de arreglar todo, Li Ying dudó en hablar.

"¿Como?"

"El maestro, me temo que ahora no se siente a gusto conmigo".

Los ojos de Li Hong se hundieron ligeramente, pensó por un momento y dijo: "De hecho, ahora está mucho más separado de Zhensheng, creo que fueron las palabras de Ah Ruo las que lo golpearon fuerte ... Este tipo de cosas no pueden ser forzadas, pero la familia Yun ha sido leal y buena durante generaciones, incluso si no está tan cerca de la familia real como antes, la sangre de los ministros leales todavía fluye en sus huesos".

De lo que estaba hablando era del día en que Yun Qingci resultó gravemente herido y volvió inconsciente.

Qin Feiruo recibió la noticia de la lesión de Yun Qingci temprano en la mañana y llegó temprano al muelle. Estaba vestida de civil y su rostro estaba pálido. Cuando vio al emperador, aún podía mantener sus modales.

Pero cuando Yun Qingci yacía sobre la pequeña tabla de madera y lo llevaban, de repente se derrumbó.

Li Hong creció con Yunyu, Qin Feiruo, incluida la emperatriz Wei, y se sintió culpable al verla así, y mucho menos con Yunyu en ese momento.

Qin Feiruo siguió temblando, las lágrimas caían como lluvia.

Yunyu le explicó, pero Qin Feiruo se negó a escuchar una palabra, ella negó con la cabeza: "Su Excelencia, no diga demasiado ... Soy una mujer, primero no entiendo su situación general, y no quiero entender".

Li Hong, quien se suponía que debía irse primero, se detuvo junto al carruaje.

Escucho a Qin Feiruo burlarse: "Hemos estado casados desde que salí del campo de batalla, y hemos sido marido y mujer durante más de diez años. Estás en la corte y antepones la lealtad, mientras yo estoy en el patio familiar, ¿por qué no puedes poner a tus hijos primero? Estás lleno de ambiciones y pones al país primero, ¿por qué no puedo poner a mi hijo primero? Ustedes quieren mantener a las mujeres a puerta cerrada y llamarlas buenas esposas y madres, pero también quieren que las mujeres vean el panorama completo y entiendan tus deseos, lealtad y rectitud... Entonces, ¿quién me entenderá? ¿Quién puede soportar mi dolor? La vida y la muerte de mi hijo son desconocidas, él es mi alma, ¿entiendes? "

(si solo supiera lo que paso realmente con su primogénito doña)

Miró a Yun Yu y luego fue a mirar a otros ministros: "¿Entiendes?"

"¿Entienden?", Preguntó uno por uno, y dijo con una sonrisa irónica: "¿No lo saben?"

¡Entiende, si entiendes, no dirás que soy un ignorante y que lo que estoy haciendo hoy es causar problemas sin razón! "