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𝖢𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 9

Maratón 3/5

°Nunca más.°
•A.B.M•

Por primera vez en años Adam estaba completamente feliz sentado en la mesa de Slytherin. Se permitía sonreír sin debilidad. No podía decir que había dejado su pasado atrás por completo. Pero había encontrado una luz que se había aferrado a él.

Al principio se había sentido inseguro de volver a Hogwarts como el hijo que había huido de casa,pero fue como si el hecho de que dejara de ser un Mañfoy derribara barreras que nisiquiera había notado que estaban ahí.

Se sentía ligero,esperaba con todo su corazón que las últimas cicatrices en su espalda se desvanecieran. Ya no le daban dolor o vergüenza. Lo hacían sentir como un sobreviviente. Un sobreviviente de Lucius Malfoy.

Y eso era algo que nada ni nadie iba a poder quitarle. Eva había desaparecido a la mitad de él viaje a Hogwarts. La había notado algo triste,pero lo unio a que Cedric ya no estaba.

Debía ser difícil para ella volver ahí sin él,por eso no la busco o pregunto. Aun así la preocupación se extendió por su cuerpo cuando no la vio en el gran comedor.

La cajital de terciopelo casi quemo en su bolsillo. Le había comprado un anillo de promesa a Eva para pedirle que fuera si novia oficialmente. Ella había visto la caja y salió del compartimento,el no la juzgo,era obvio que eso era difícil para ella.

Se sintió incomodo cuando Masón Nott paso por el sombrero seleccionador y se sentó en la mesa de Slytherin. Masón era todo un remolino,en especial cuando eran niños,hacía cada tipo de travesura que Adam intentaba evitar por miedo a las reprimendas.

Siempre envidio la libertad de Masón, verlo ahí sentado con despreocupación haciéndole saber a todos que nada le afectaba o hería le hizo seguir sintiendo celos. Algo de molestia también,era obvio para el que seguro el señor tenebroso ya lo había reclutado.

Alguien tan temperamental y rápido como Masón le daría al hombre un mortifago capaz y feroz,su falta de culpa lo haría aún más fácil. Haría más fácil hacer lo que los Mortifagos debían o eso pensaba Adam.

Dumbledore dio un discurso que se vio interrumpido por la enviada del ministerio,Dolores algo. Adam no le había prestado atención,la mujer no le era interesante. El discurso de la mujer fue interrumpido por alguien entrando al gran comedor.

El alivio recorrió el cuerpo de Adam al ver que era Evangeline. Con el cabello y la ropa mojados,una chaqueta de cuero encima que definitivamente no era suya. No creyó que ella notara que aspiraba el olor de la prenda como si le diera tranquilidad.

Su mirada fue fría y altanera mientras caminaba hacia su mesa. Sus pasos seguros y fuertes,poco propios de la chica que el había conocido antes y que caminaba y desprendía amabilidad.

Le pareció extraño y casi le recordaba a Arabela. Si madre le hablaba de ella mucho,no sabía en esa época que era la madre de Evangeline,no había fotos,solo recuerdos que su Madre murmuraba asustada de que alguien más oyera.

Sus pasos eran seguros y fueres. No oias nada más que sus pasos cuando ella entraba a una habitación.

Borro la voz de su Madre de su mente,Evangeline no era Arabela. La vista del rubio fue a su primo que miraba a Masón con pesar,como si viera en el su futuro. Eso apretó el corazón de Adam,Eduard no había podido escapar como el. Aun que en su mente se ideaban planes para sacar a su primo de eso y si Draco se dejaba ayudar,a él también.