• 𝑳𝒂𝒃𝒆𝒓𝒊𝒏𝒕𝒐 𝒅𝒆 𝑴𝒆𝒏𝒕𝒊𝒓𝒂𝒔 •

ℂ𝔸ℙÍ𝕋𝕌𝕃𝕆 1

- Cielo te ves muy hermosa -dijo Tom al ver a su única hija lista para casarse

- Gracias papá -respondió ella con emoción y un abrazo

- Tú madre estaría muy feliz y orgullosa de ti cielo

- Como me gustaría que ella estuviera aquí con nosotros para compartir esta inmensa felicidad -dijo mientras sus ojos se cristalizaban

- Esta con nosotros hija, vive en nuestros corazones. Ella siempre cuida de ti

- Lo se papá, pero la extraño demasiado -dijo la azabache volviendo a abrazar a su padre con fuerza mientras algunas lágrimas se deslizaban por sus mejillas

- Te entiendo cariño, a mi también me hace mucha falta. Pero no debes estar triste, este es un gran día para ti, debes sonreír y disfrutar -ella sonrió- justo así, ve a limpiarte esas lágrimas, te esperare en el auto, no tardes

- Esta bien. Papá te quiero mucho

- Yo te amo mi pequeña

°• Mientras tanto •°

- ¿Estas seguro de esto? -preguntó la de mechón rojo

- No tengo otra opción Natalie

- Si no quieres hacerlo, simplemente vete no pasará nada. Tiene que haber otra forma de solucionar los problemas

- Soy esa solución Natalie, voy hacerlo, me casaré con ella

- Pero....

- No lo intentes Natalie, no harás que cambie de opinión

- Bien... solo espero que después no te arrepientas de hacer esto por las razones equivocadas -dijo la mujer para después alejarse de él

- ¡Adrien por Dios cambia esa cara! -dijo Gabriel acercándose a Adrien, quien esperaba la llegada de la novia a las afueras de la iglesia

- Lo siento papá, no tengo otra -respondió fríamente el rubio

- Tienes que estar feliz cariño, es el día de tu boda -agrego Emilie- es un día especial

- ¿Y crees que eso me hace feliz? No mamá, sabes muy bien porque hago esta estupidez

- Cariño, debes por lo menos fingir un poco de alegría

- Me pides imposibles mamá, no se como tu y papá me metieron en esto

- Escucha Adrien, eres nuestro hijo el único capaz de recuperar todo lo que nos pertenece, y lo más importante nuestra empresa

-Lo tengo muy presente papá

- Ahora entra allí y cumple -dijo la rubia

- Jamás pensé que tú fueras así mamá

- Cuando me case con tu padre prometí estar siempre con el y apoyarlo en todo, EN TODO

- Aún pasando sobre tu hijo y su felicidad

- Oh vamos Adrien, no seas dramático, es solo un pequeño sacrificio que no durará mucho. Luego serás completamente libre para hacer lo que te venga en gana. Y recuerda que esto también te sirve a ti, para vengar eso tan horrible que esa mujer te hizo

- Si, es lo único que me hace tener el valor de hacer esto

- Bien ahora ve. Te amo cielo

Adrien ingreso a la iglesia y espero en el altar a que llegara su futura esposa. Su rostro reflejaba seriedad y disgusto

- ¡Que diablos estoy haciendo! -se preguntó en su susurro a si mismo

De pronto la marcha nupcial inició indicando así la entrada de la novia a la iglesia. Ella se veía muy sonriente, feliz