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، 🍭 : Capítulo 07.

—Oh... Joder —jadeó Jungkook enredando sus dedos en el cabello del menor.

Antes de llegar a esa situación tenía a Jimin sobre su escritorio comiéndole la boca mientras masajeaba su miembro erecto todavía dentro de su pantalón.

Park se había separado del beso y lo empujó levemente para que se siente en su silla, se sentó en su regazo desabrochando su camisa. Su saco y corbata estaban tirados en el suelo debido a que Jimin se los quitó. Estaba disfrutando tocar el cuerpo del menor pero cuando intentó desabrochar su pantalón, este lo detuvo y le dijo "en este tipo de situaciones me gusta tener el control. Todavía no vas a tocarme". Y se escuchó tan jodidamente sensual que su pene dolió más dentro de su bóxer.

Jimin dejó un rastro de besos y marcas por todo su pecho hasta quedar arrodillado frente a él, su pantalón y ropa interior quedaron en sus rodillas quedando expuesto ante Park. Este le dedicó una pequeña sonrisa antes de tomar su miembro y dar una larga lamida hasta el glande. Y así llegaron a la situación actual.

Jungkook arqueó la espalda cuando Jimin se centró en su glande mientras masturbaba el resto, trataba de no gemir tan alto ya que, por más que nadie entraba a su oficina, podrían escucharlo si pasando delante de ella.

Su labio inferior estaba maltratado debido a que lo mordió para moderar sus gemidos, su pecho subía y bajaba mientras sus ojos estaban llenos de lágrimas de placer. Estaba sorprendido, nadie lo había hecho llorar del placer como Jimin lo estaba haciendo, normalmente él hacía llorar a su acompañante y no al revés.

Pero con Jimin no se quejaba.

—Jimin... —gimió su nombre cuando el nombrado empezó a mover su cabeza más rápido.

Estaba demasiado cerca de su orgasmo, ni siquiera logró decirle a Park que estaba cerca ya que eyaculó en su boca sin previo aviso. Agradecía estar 100% limpio. El pelirosa se separó y tragó ese líquido mientras le sonreía.

Tiró su cabeza para atrás tratando de regular su respiración con los ojos cerrados, a los segundos los volvió a abrir al sentir que el pelirosa acomodaba su ropa.

—Bueno, tengo que irme, jefe. Todavía tengo mucho trabajo... —se dio media vuelta con intenciones de irse claro que Jeon fue más rápido en acorralarlo contra su escritorio. Chocando su pecho con la espalda del menor.

—Te vuelvo a repetir la pregunta: "¿de verdad piensas que te voy a dejar ir?" —susurró en su oído, su voz era más ronca de lo normal. Mordió su lóbulo y empezó a dejar besos por su nuca mientras sostenía su cadera con su mano.

Jimin mordió su labio inferior y gimió bajito cuando Jeon empezó a frotarse contra él. No era mentira que quería tener sexo con su jefe pero también se le hacía divertido jugar con él.

—Mmh, señor Jeon... —se dio la vuelta. Estaba a escasos centímetros de su rostro—. Creo que... lo mejor tiene que esperar, ¿no cree?

Jungkook sonrió arrogante —¿Estás seguro, hermoso? Tenemos tiempo todavía... ¿No deseas que te toque? ¿Qué te haga gritar del placer?

Jimin ladeó su cabeza y suspiró por los besos de Jeon en su cuello, subiendo por su mandíbula hasta llegar a sus labios nuevamente. El pelinegro lo tomó por los muslos y lo llevó hasta el sillón de su oficina, recostó a Park sobre este quedando entre sus piernas.

Bajó sus manos hasta adentrarse en su camisa, tocando su suave piel y sus sensibles pezones, el pelirosa arqueó la espalda y el gemido que brotó por su garganta fue amortiguado por los labios contrarios. Abrió la boca recibiendo con gusto la lengua del mayor.

Dios, Jimin deseaba tanto ver el cuerpo de Jungkook completamente desnudo, tener sus caderas juntas mientras tenían sexo, lo deseaba tanto pero quería hacerle el de rogar para ver cuanto podría aguantar su sexy jefe.