No te Niegues, aún te queda mucho por sentir.

✨Capítulo: 18✨

-¿Hay alguien ahí?. -escuchamos que alguien preguntaba en alguna parte del invernadero.

-¿Quién es?. -pregunta Paul poniéndose de pié.

-Ven vamos, seguramente debe de ser Andrés, debió escucharnos. -comenté mientras caminaba hasta la salida, Paul me miró confundido y entonces continúe hablando.

-Es el jardinero, hace años que vive aquí y se encarga de todo.

Caminamos hasta la salida y efectivamente ahí se encontraba Andrés, no había cambiado nada, seguía igual que la última vez que lo ví.

-Señorita Mia.. -habló apenas sus ojos conectaron con los mios.

-Andrés, por favor solo Mia o Sophia. -sonreí y me acerqué para abrazarlo.

-Cuanto tiempo Sophia, has cambiado mucho. -dijo tomando mi mano, Andrés siempre fue un buen amigo, además de ser el jardinero, siempre lo quise mucho, e incluso muchas veces molestaba a mi abuela Anni, diciéndole que lo quería de abuelo.

-Te has convertido en una hermosa mujer. -su voz me sacó de los pensamientos.

-Gracias Andrés, si hace ya unos años, disculpa la otra vez no te vine a visitar, lo tenía pensado, pero debí irme antes de tiempo. -intenté sonreír, pero no creo que mi sonrisa haya llegado hasta mis ojos.

-¡Aaah! Andrés, te presento a Paul, el es mi novio. -presenté a Paul, el cual sonrió y caminó hacia Andrés.

-Un placer conocerlo. -dijo cortésmente, ofreciéndole su mano.

-El placer es todo mío. -respondió amablemente Andrés, aceptando el saludo.

-Seño.. Sophia. -me habló Andrés.
Sonreí al mirarlo, porque se que me iba a decir señorita.

-Dime. -le contesté y sonreí.

-No me avisó de la hora, pero puedo preparales algo de cenar .

-No se preocupe, ya cenamos. -esta vez respondió Paul, yo solo dije que si con un asentimiento de cabeza.

-Bueno entonces los dejaré solos, ya sabe dónde encontrarme. -comentó retirándose y dejándonos solos.

Tomé de la mano a Paul y caminamos a la entrada de la gran casa.
Era inmensa de grande, de colores llamativos, a mi abuela siempre le gustaron.

Cuando puse un pié en la entrada, me invadieron muchos recuerdos, fue como verme a mí misma años atrás ahí en la misma casa.

Flashback

-Ven Cariño, a caso te piensas quedar en la puerta, está será tu casa a partir de ahora. -me habló mi abuela desdé su sofá, se encontraba sentada en el mismo, leyendo uno de sus libros.

Caminé hasta ella, dando pequeños pasos y con mi maleta rodando detrás.
La casa de mi abuela nunca dejaba de impresionarme, más que casa parecía un palacio de lo grande, largos pasillos y muchas escaleras.

-Pequeña, ven aquí. -me llamó dulcemente, indicándome que me sentara en su regazo.

Me acerqué a ella y me aferré a sus brazos, mientras ella acariciaba mi cabello.

-Venga vamos, sube a tu nueva habitación, en la primera planta la segunda puerta de la derecha, espero que te guste, la decoré yo misma.. -sonrió mientras hablaba, la besé en la frente y subí hasta la habitación.

La dulce voz de Paul me saca de mis pensamientos.

-Cariño, no vamos a pasar. -lo miré un poco desorientada y caí en cuenta que aún no pasábamos del umbral de la puerta.