El diario de Chiara Oliver - Kivi

Con desconcierto (23)

Querido diario,

Hoy fue un día de emociones encontradas y frustraciones. Al llegar al colegio, no pude evitar notar a Violeta entrando por la puerta principal. A pesar de todo lo que ha sucedido, no pude evitar reconocer lo atractiva que es físicamente. Fue un pensamiento contradictorio, ya que sé que detrás de esa apariencia hay una persona que ha hecho mucho daño.

Me molestó admitir que Violeta posee una belleza evidente, y lidiar con esa realidad fue difícil. Traté de apartar esos pensamientos y centrarme en mis propios principios, recordándome a mí misma que la belleza exterior no siempre refleja la bondad interna. La contradicción entre la apariencia y las acciones de Violeta me recordó cuán complejas pueden ser las emociones humanas.

En cuanto a Martin, a pesar de mis esfuerzos, no logré que volviera a la obra. Violeta, con su influencia y maquinaciones, parece haber tenido éxito en separarnos en ese aspecto. Fue desgarrador no poder revertir esa decisión y ver a mi amigo alejarse de algo que ambos habíamos abrazado con entusiasmo.

La impotencia se apoderó de mí mientras observaba a Violeta y reflexionaba sobre el curso de los acontecimientos. Aunque sé que ella es una persona perjudicial, no puedo ignorar la realidad de que tiene la capacidad de afectar significativamente mi vida y la de Martin.

Mañana es otro día, y seguiré buscando maneras de abordar esta situación. No permitiré que la influencia de Violeta defina mi experiencia en la obra o en la escuela.

Hasta mañana, querido diario.

Con desconcierto,

Chiara Oliver