Capítulo 19

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Juliana observaba con detenimiento el modelo miniatura de un auto clásico que había comprado, "¿Cómo es que estás cosas cuestan tan caro? ni que me fuera a subir en él e irme conduciendo a casa" pensó con una expresión extrañada. El encargado de la tienda le había asegurado que era un modelo original y que muchos coleccionistas lo compraban o en todo caso iba muy bien de decoración para una oficina o habitación; ella que no sabía mucho de coleccionar cosas (lo único que alguna vez había coleccionado eran los cartillas de las Chicas Super Poderosas pero eso había sido hace diez años y cada sobre era económico) solo procedió a entregar su tarjeta y observar dolorosamente como la pasaban por la caja registradora.

- Lo importante es que ahora tengo un regalo y no llegaré con las manos vacías.

- Te preocupas demasiado, pero debo admitir que está bonito, diremos que es de ambas.

- ¡Oye! Compra tu propio regalo – reclamó la chica de ojos cafés abrazando la bolsa de regalo contra su pecho como defendiéndolo de un ladrón.

- I don't have to, we are arriving together because you are making me go with you even though your girlfriend is gonna be there (No tengo qué, vamos a llegar juntas porque me estás haciendo ir contigo a pesar de que tu novia va a estar ahí)

Amy respondió con soltura mientras comía de su helado de vainilla.

- ¡Oigan dijeron no inglés si las dejaba acompañarme! – Ruth no tardó en quejarse con sus dos acompañantes, en realidad la salida era porque tenía que comprar unos materiales para un proyecto de una clase que había adelantado durante las vacaciones y esas dos se habían colado.

- Perdón, perdón es que Juliana aquí me está forzando a ir a una fiesta porque le da miedo la gente rica, pero yo no entiendo ella sale con una.

- Tú dijiste que querías ir por el chisme y no le tengo miedo a la gente rica, solo que no quiero verme acorralada por los amigos de Val otra vez y estar sola.

Juliana se defendió inmediatamente, solo recordar la última vez que había estado en presencia de los amigos de Val la hacía temblar de ansiedad. No hacía falta explicar que le habían observado todo desde el pelo hasta la punta de los pies, todo eso mientras Val galopaba alegremente en un caballo golpeando una diminuta pelota por el campo con sus compañeros de equipo. Absurdo, a ella le había parecido un deporte bastante menso y pretensioso, aunque Valentina en ese uniforme no tenía pierde, lástima que nunca la volvería a ver así "no si lo puedo evitar al menos".

- Esperen, esperen, ya me perdí ¿Qué fiesta? Y ¿por qué Juliana le tiene miedo a la gente rica? Aunque esa parte la entiendo hace unos días me vi está película "Boda sangrienta" en donde una chica pobre se casa con un tipo adinerado y la noche de bodas tienen que jugar un juego donde el resto de la familia la persigue para intentar matarla, los ricos no son de fiar.

Juliana tragó en seco mientras Ruth parloteaba sobre el argumento de la película "la familia de Val no es así por Dios...al menos eso espero" si hay algo que ella no podía hacer era correr muy lejos, su corazón como que no le iba a cooperar mucho.

- Boba, la estás asustando, pero esa sí es una muy buena peli la verdad.

- Por eso te tolero, Amy, al menos tienes buenos gustos en películas... pero que clase de insulto es boba ¿Quién dice esas cosas tan infantiles? jajajajajaja

- El mejor jugador del mundo – respondieron Amy y Juliana al mismo tiempo como robotitos.

- Mejor no pregunto más, pero si respóndame esto pensé que Juliana estaba soltera es decir no te ofendas, pero no eres como que la persona más sociable del mundo y eso que te lo digo yo que me la paso el setenta por ciento de mi tiempo entre el laboratorio y mis clases.

El corazón roto de Juliana ValdésDonde viven las historias. Descúbrelo ahora