3-Ella te importa más

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*Dani*

**1 semana y 4 días antes de la fiesta**

-Llegas tarde-me dijo Gavi con burla abriéndome la puerta y yo rodé los ojos.

-Si yo te lo echara en cara cada vez que has llegado tarde tu-le dije entrando y el rió cerrando la puerta.

Había cambiado la distribución del salón abriendo el sofá quedando casi como una cama, y había puesto una mesa con patatas, chuches y palomitas frente a la gran tele que tenia en el salón.

Lo miré sorprendida y el me sonrió.

-Te dije que te lo compensaría-me dijo guiñandome un ojo y yo sonreí retirando la mirada de él mientras me mordía el labio.

Él se tiró al sofá poniendo sus brazos cruzados bajo su cabeza y me miró desde ahí.

-Venga, que tienes que elegir la peli-me dijo y yo sonreí quitándome los zapatos para sentarme también.

Empecé a buscar pelis, hasta que di con una que me gustaba un montón, aunque ya habíamos visto unas cien veces.

-Otra vez no-me dijo rodando los ojos.

-Dijiste que yo la elegiría-le repliqué.

-Ya, y así va a ser, pero es que me sé hasta los diálogos, ¡solo la pones porque el tío es guapo!-me dijo riendo y yo abrí la boca haciéndome la ofendida.

-Si fuera por eso habría puesto titanic, ¿Has visto a Dicaprio en titanic? Está como un queso-le dije obvia y el rodó los ojos.

-Yo soy más guapo que Dicaprio en el titanic y no me dices nunca que esté como un queso.

-Quisieras Gavira, quisieras-le dije y él frunció el ceño.

-Lo soy-zanjó.

-Lo que tu digas, pero vamos a ver la peli-le dije y el suspiró.

-Lo que diga la niña-murmuró mientras yo le daba al play de una de mis pelis de amor favoritas, "cómo perder a un chico en diez días".

Me acomodé en el sofá en cuanto empezó, y Gavi me atrajo hasta él dejándome apoyada en su pecho.

Era algo normal en nosotros ser así el uno con el otro, desde pequeños habíamos sido así, "como hermanos" según Gavi.

Me mataba esa frase, cada vez que decía que yo para el era como Aurora, una hermana.

Podría ser una frase preciosa para un mejor amigo y era consciente de ello, pero a mí me hacia daño escucharlo, porque para mí el no era un hermano, y nunca iba a serlo, porque yo quería todo con el, y eso no era muy de hermanos.

Dejó un beso en mi frente y empezamos a ver la peli comentando fragmentos de ella, mientras Gavi hacia comentarios graciosos de ella que me hacían estallar a carcajadas, sabía perfectamente que decirme en cada momento para sacarme risas sin parar.

Nos lo estábamos pasando genial, hasta que el timbre sonó y tuvimos que parar la peli a la mitad.

Fue Gavi el que fue a abrir mientras yo me sentaba con la espalda apoyada en el respaldo del sofá, y volvió solo unos segundos después, pero delante de él venía ella, Esther, que rodó los ojos al verme sin disimular.

-No sabía que estaba ella aquí-le murmuró en tono bajo girandose hasta él cruzandose de brazos.

Vi como el se quedó callado sin saber qué decir mientras hacía una mueca con la boca, y me di cuenta que había sido un error quedar con él, asique me levanté poniéndome mis zapatos y mi chaqueta.

JURAMENTO ETERNO DE SAL-PABLO GAVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora