35-señora páez

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*Dani*

-Necesito un descanso, me tiemblan las piernas-le pedí a Gavi con la respiración agitada.

El sonrió dándome un beso en la mejilla.

Habíamos madrugado demasiado cariñosos esta mañana, pero con tres polvos seguidos mis piernas ya ni me funcionaban, estaban echas un flan y a Gavi parecía que no se le acababa la pólvora.

No es que me molestase, todo lo contrario, el sexo era increíble con el, siempre sabía donde morder o como hacerlo para volverme loca, pero me faltaba incluso el aire de la excitacion.

-Soy adicto a ti-me dijo en mi cuello y yo sonreí acariciando su nuca.

-Y a mi me encanta que lo seas-le aseguré y él volvió a mis labios dejando un pico en ellos.

-¿Qué voy a hacer yo dos semanas durmiendo separado de ti?-me dijo y yo reí pasando las manos por cu cuello.

-Sobrevivirás-le aseguré.

-No te creas, me encanta estar toda la noche contigo pegada a mi pecho, descanso como un rey cuando duermes en casa-me dijo y yo sonreí como una boba.

-A veces siento que todo esto es un sueño y que voy a despertarme y volverás a ser solo mi mejor amigo-admití poniéndome algo más seria y él frunció el ceño.

-Entonces voy a tener que darte besos hasta que te des cuenta que estas despierta-me dijo dejando besos por mi cuello y yo sonreí acariciando su espalda justo cuando el timbre de casa sonó.

Gavi chasqueó la lengua y me miró poniendo un puchero.

-Siempre nos interrumpen, tio-se quejó levantándose buscando sus calzoncillos y yo reí mordiendo mi labio, joder que bueno estaba este niño, tenía mejor culo que yo.

Se vistió con lo primero que pilló, mientras la persona que tocaba el timbre seguía pegando con insistencia.

Me estiré en la cama buscando mi móvil, pero casi que no me dio tiempo cuando Pablo entró en la habitación.

-Mi vida, es ferran, por si quieres bajar-me dijo y yo asentí levantándome de la cama para vestirme a toda prisa.

El valenciano estaba sentado en la isla de la cocina con Gavi con cara de pocos amigos.

-Hola guapetón-le dije dándole un beso en la mejilla.

-Hola-me dijo forzando una sonrisa y dirigió la mirada hasta ambos-siento mucho todo lo de ayer, la debí dejar en cuanto la escuché, pero quería saber más sobre qué estaba tramando-nos dijo.

-¿Qué escuchaste?-le pregunté sentandome frente a él.

Cogió aire y nos miró muy serio.

-La escuché hablar por teléfono sobre vosotros con alguien, se que era una mujer también porque le dijo "tía no te preocupes, los voy a separar quédate tranquila"-repitió y yo miré a Gavi sin dar crédito a lo que estaba escuchando- no se con quien hablaba, sólo que después escuché como le decía que yo no le gustaba nada, que estaba harta de fingir para acercarse a Gavi por ella y se ve que la otra persona le recriminó que tampoco se pasase con lo de acercarse, porque ella le contestó "relájate que ni que me lo fuera a follar, pasada"-dijo ferran y a mi mente solo vino el nombre de una persona.

-Esther-soltó Gavi y yo asentí mientras ferran se encogió de hombros aguantando las lágrimas.

Me acerqué a él abrazandolo y sentí como soltó un sollozo sonando muy roto.

-Ferri..-susurré acariciando su espalda.

-Yo pensaba que ya la había encontrado, a mi me gusta de verdad, pero solo me ha utilizado, después de lo de Sira creía que había encajado con alguien de verdad y solo ha jugado conmigo para haceros daño-sollozó y yo miré a Gavi con pena, igual que el miraba la escena.

-Escuchame ferran-le dije cogiendo su cara por sus mejillas y limpiando sus lágrimas con mis pulgares-ella es la que te pierde a ti, no tu a ella, eres genial, eres atento, eres cariñoso, eres buena persona...tienes todo lo que una mujer en condiciones busca en un hombre, y encontrarás la tuya-le dije y yo se sorbió la nariz asintiendo.

-Gracias, de verdad-me dijo volviendo a abrazarme y yo solo pude abrazarlo más fuerte.

Levantó la cabeza mirando a Gavi y le indicó con el brazo que se uniera al abrazo, cosa que mi Sevillano hizo dándole ánimos a su amigo.

-¿Entonces la has dejado?-le preguntó Gavi y el asintió.

-Ayer, se lo conté, que la había escuchado y que no sabía que estaba tramando, pero que nada iba a poder con vosotros dos-nos dijo y yo hice una mueca acariciando su espalda.

-En eso tienes toda la razón, porque antes de separarme de Dani me separan la piel del cuerpo-dijo Gavi alzando las cejas.

Yo sonreí al escucharle decir eso, porque mi pablo era lo más bonito que había en el mundo.

-¿Ves? Algo así quiero yo, no pido tanto joder-dijo ferran sonriendo y yo acaricié su pelo con una sonrisa mientras miraba a mi novio.

-Tranquilo, que lo tendrás, estoy segura-le dije para animarlo.

Nos pasamos toda la tarde con ferran, el y Gavi jugaron al fútbol en el jardín, después vimos una peli y comimos guarrerias, hasta que llegó la hora de irnos a Sevilla y el valenciano se fue de casa.

Pasamos a mi casa a por mi maleta, y pusimos rumbo a Sevilla en coche. Si, en coche. Porque así yo no tenía que subirme en avión y Gavi también prefería tener el coche en Sevilla.

Aunque llegamos casi a las doce de la noche a Sevilla, Gavi seguía cantando a todo pulmón en el coche haciéndome reir.

-¿Seguro que no prefieres quedarte en casa conmigo hoy?-me repitió haciendo un puchero que amé con todas mis fuerzas.

-Mi vida, mis padres me están esperando-le dije acariciando su nuca y el asintió aceptándolo.

Entramos a mi calle aparcando frente a mi casa, y Gavi sacó la maleta del coche acompañándome hasta la puerta de casa.

Busqué mis llaves y me di la vuelta en su dirección antes de abrir, pasé los brazos por su cuello mientras el pasaba los suyos por mi cintura y nos dimos un beso de buenas noches del que ninguno quería separarse del otro.

Hasta que la puerta se abrió saliendo por ella mi padre, que nos miró alzando las cejas ocultando una sonrisa.

-Chicos, podéis besaros dentro de casa, eh-nos dijo y mi madre le pegó un manotazo en el brazo saliendo de detrás de él haciéndonos reír mientras nos separabamos.

-Buenas noches-dijo Gavi poniendo la cara de niño bueno que siempre ponía frente a mi padre.

-Buenas noches, hijo, pasad-dijo abriendo más la puerta-¿habéis cenado?

-Si, paramos a cenar a las nueve papá-le dije mientras cogía mi maleta que arrastraba Gavi.

-¿Quieres quedarte a dormir, hijo?-Le dijo mi madre a Gavi.

-Gracias Celia, pero mis padres me deben estar esperando en casa-le agradeció mientras se acercaba a dejar un pico en mis labios.

Le dio la mano a mi padre antes de salir y le acompañé hasta la puerta.

-Avisame cuando estés en casa-le pedí.

-Amor vivo a dos calles-me dijo el riendo y yo rodé los ojos.

-Avisame-le pedí.

-Te aviso, te aviso-me dijo volviendo a poner morros, y solo pude sonreír dejando otro beso en sus labios-te amo-me dijo al separarnos.

-Te amo-le contesté mientras le veía andar hasta el coche y como me guiñaba el ojo antes de subirse.

Cerré viendo a mis dos padres sonreír como bobos en el salón.

-Eh...¿mañana hablamos vale? Que me muero de sueño-les dije y ambos asintieron mirándome embobados.

Papa me subió la maleta hasta el cuarto y me dio un beso antes de salir por la puerta de la habitación.

-Hasta mañana, señora Páez-me dijo con burla y yo rodé los ojos sonriendo.

-Hasta mañana-le dijo sonriendo como una boba, ojalá ser algún día la señora Páez...

(CONTINUARÁ...)

Mañana mass❤️✨️

JURAMENTO ETERNO DE SAL-PABLO GAVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora