Advertencia: En este mundo nunca paso el desastre de la desesperación, es decir que Junko nunca existió pero si existió la clase 77 y el proyecto de cultivación de la esperanza que aquí...No salio tan bien.
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A medida que los días avanzaban, la situación de Teruhashi parecía ir de mal en peor. La noticia del ingreso de Venus a Kibougamine y su aceptación como estudiante definitiva había sacudido el pequeño mundo perfectamente construido que Teruhashi había cultivado meticulosamente a su alrededor. Aunque inicialmente sus amigos y seguidores se habían apresurado a ofrecer consuelo y apoyo, repitiendo las acusaciones y rumores que Teruhashi había esparcido sobre Venus, la atención pronto comenzó a disminuir.
Los comentarios despectivos hacia Venus, tales como "¡Venus es cruel y horrible no merece estar en Kibougamine!" empezaron a perder fuerza después de una semana. Los amigos y conocidos de Teruhashi, al no ver ninguna prueba concreta de su comportamiento supuestamente malicioso y al ser testigos del evidente éxito de Venus, gradualmente retiraron su apoyo vocal, dejando a Teruhashi sintiéndose cada vez más aislada y traicionada.
El golpe final llegó cuando una nueva cuenta de Instagram, bajo el nombre de "Lady Venus", comenzó a ganar popularidad rápidamente. Las imágenes mostraban a una joven increíblemente hermosa y elegante, vistiendo un traje monocromático que destacaba su figura de manera espectacular. Los seguidores se acumulaban por miles, encantados con la transformación de Venus y su innegable talento en el diseño y la moda.
Teruhashi, al ver las fotos, reconoció inmediatamente a su hermana, aunque la Venus que mostraban esas imágenes era muy diferente a la imagen que ella había intentado pintar ante los demás. El cabello de Venus, mostrado en su color natural, y su expresión segura y sofisticada eran reveladores. La gente no solo la veía ahora como alguien talentosa, sino también como una figura glamorosa y deseable, desmontando por completo la narrativa que Teruhashi había construido, por supuesto que Teruhashi nunca dijo nada sobre ella.
El impacto de este cambio fue profundo y doloroso para Teruhashi. No solo se sentía traicionada y abandonada por aquellos que una vez se habían alineado con sus percepciones y prejuicios, sino que también enfrentaba la dura realidad de que su hermana estaba logrando lo que ella había soñado para sí misma. La admiración y el reconocimiento que Venus estaba obteniendo era un recordatorio constante del propio fracaso de Teruhashi en ganarse el mismo tipo de atención genuina y respeto.
Mientras Venus florecía, Teruhashi se encontraba en una encrucijada dolorosa, luchando con sentimientos de envidia, ira y una creciente sensación de irrelevancia que no era real en su vida.
-¡Kusuo!- Teruhashi abrazó a su novio sonriente- ¿Como estás hoy? ¿No hace un lindo día?-
-"Buenos días cariño"-
Saiki y Teruhashi, a los ojos de todos en su entorno, encarnaban la imagen de la pareja perfecta. Cada uno de ellos destacaba por su cuenta: Saiki, con su enigmática presencia, y Teruhashi, siempre radiante y encantadora, con una habilidad innata para captar la atención y el afecto de quienes la rodeaban.
-Miralos ¿No son lindos?-
-Que envidia me da-
-Me encantaría salir con un chico como Saiki-
Cuando estaban juntos, parecían complementarse de manera ideal. Teruhashi, con su carisma y gracia social, a menudo tomaba la iniciativa en las conversaciones, brillando en el centro de atención mientras Saiki, más reservado y contenido, la apoyaba con su presencia tranquila y segura. Ella reía y charlaba con facilidad, mientras él asentía y sonreía a su lado, su silencio a menudo interpretado como un signo de su profunda comprensión y admiración por Teruhashi.
En eventos sociales, Teruhashi vestía con elegancia, cada detalle de su apariencia cuidadosamente seleccionado para destacar, mientras que Saiki mantenía un estilo más sobrio, aunque siempre pulcro y adecuado para la ocasión. Juntos, desfilaban por reuniones y fiestas, recibiendo cumplidos y envidias por igual. Teruhashi disfrutaba de ser vista con alguien tan único como Saiki, mientras que a él, aunque a veces le resultaba incómodo el foco de atención, le parecía más fácil navegar el escenario social con Teruhashi a su lado.
En público, la pareja compartía sonrisas y gestos cuidadosos que eran captados y comentados favorablemente por sus amigos y compañeros. Parecían profundamente en sintonía, con Teruhashi a menudo tocando el brazo de Saiki o inclinándose hacia él durante sus conversaciones, y Saiki escuchándola con una atención que a ojos de todos parecía total.
Sin embargo, esta imagen de perfección era en gran parte una fachada cuidadosamente mantenida. Detrás de las sonrisas compartidas y la aparente armonía, había tensiones y desencuentros que raramente se mostraban al mundo exterior. Saiki, con su tendencia a la introspección y su desinterés en la fama o el reconocimiento, a menudo se sentía incómodo con la constante búsqueda de atención de Teruhashi. Por su parte, Teruhashi, aunque valoraba la presencia de Saiki, a veces se sentía frustrada por su falta de entusiasmo y participación en su vida social.
Esta disonancia entre su vida pública y sus verdaderas dinámicas personales creaba un complejo tejido de realidades que ambos manejaban como podían, manteniendo la ilusión de la pareja perfecta para el mundo exterior mientras navegaban sus verdaderos sentimientos y desafíos en la intimidad.
Teruhashi solo lo deseaba por despecho y Saiki solo acepta a Teruhashi por la última petición de Venus.
"Cuida de ella"
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